La joven, nacida en Egipto y residente en el país norteamericano desde el año 2000, saltó a la fama luego de que el fotógrafo publicara dos imágenes de ella en su cuenta de Instagram, TheSUNK.
Boston Globe informó que el hombre la etiquetó con el permiso de Anok, por lo que ella comenzó a recibir miles de notificaciones. “Mi teléfono vibró por mucho tiempo. Al principio pensé que alguien había hecho un meme de mí o algo así”, comentó la joven, estudiante de bioquímica en la Universidad de Plymouth, en Nuevo Hampshire.
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La hermosa egipcia aseguró a ese medio que la moda y el arte siempre le llamaron la atención, pero que el modelaje era un sueño que, pensaba, no iba a poder cumplir. Esto cambió luego de que sus fotos se viralizaran, pues 3 agencias la llamaron ofreciéndole un contrato, señaló el medio.
Anok también contó a ese diario que inicialmente quedó sorprendida por la reacción de la gente, ya que a ella no le gustó la forma como quedó en las fotos.
“Creo que la gente está tan acostumbrada a verse a sí misma, que no ve su propia belleza”.
En entrevista con Washington Post, ella manifestó que desde la publicación de las fotos (hace una semana), las llamadas de medios de comunicación no han parado, y que, de alguna manera, se siente abrumada por esa situación:
“Hubo un día en que tuve un montón de clases, y había hecho de tres a cuatro entrevistas, y mi hermana seguía diciéndome ‘aquí hay otra y aquí hay otra'”.
También confesó que estaba nerviosa al pasar de ser una joven normal “a una modelo famosa en Instagram”. Según su relato, “no estaba segura de si podría manejar todas las expectativas” de la gente.
El periódico indicó que la universitaria continuará con sus estudios en bioquímica y los alternará con el modelaje.
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