El estadounidense decidió quebrar, literalmente, la marca que él mismo ostentaba (que estaba en 20 vidrios), como reconoce El Comercio.

Lo increíble de este récord es que Taylor consigue su objetivo con sus manos, por lo que un carro difícilmente se le resistiría.

En el video, que dura cerca de 3 minutos, se aprecia el ritual por el que pasa Kevin antes de quebrar los vidrios a su antojo.

Y todo esto tiene justificación, ya que es experto en artes marciales y ese no es el único récord que ostenta, como asegura el medio.

Taylor también destrozó 809 ladrillos y 10 garrafas de cristal en menos de un minuto. Vea el video y compruebe con sus propios ojos el talento de este hombre.

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