La Universidad de Ciencia y Tecnología de China es la encargada de esta impresionante obra de la robótica que, a pesar de no poder reír o llorar, sí puede gesticular e, incluso, posar para una fotografía, informa Engadget.

Su capacidad da para tanto que puede expresar su desacuerdo en caso de que una fotografía en la que ella aparezca, no le haya parecido buena.

El diseño de Jia Jia tomó 3 años, y aún no está del todo terminada, ya que los investigadores están analizando la posibilidad de que exprese emociones como la alegría y la tristeza.

De igual forma, Chen Xiaoping, jefe del equipo que desarrolló el androide, expresó su deseo de que, además de emociones, Jia Jia cuente también con reconocimiento facial. El tiempo dirá si todo eso es posible.

Así reportaron los medios en China la existencia de Jia Jia:

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