Se trata del número uno de las cadenas de alimentos orgánicos y especializados de Texas y el acuerdo se selló por 42 dólares la acción. Whole Foods cotizaba en el rango promedio de 30 dólares la acción en mayo y la primera parte de junio.
La cadena, que ha enfrentado la presión de los inversionistas, continuará operando tiendas bajo su marca y será dirigida por su cofundador y presidente ejecutivo, John Mackey, dijeron las compañías.
“Esta sociedad representa una oportunidad para maximizar el valor de los accionistas de Whole Foods Market, al mismo tiempo que amplía nuestra misión y aporta la más alta calidad, experiencia, conveniencia e innovación a nuestros clientes”, dijo Mackey.
En mayo, Whole Foods reemplazó a cinco miembros del directorio y a su director financiero.
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Un fondo de cobertura evaluó que la compañía estaba subvalorada y necesitaba revisar sus operaciones y considerar “alternativas estratégicas”, un término que usualmente se utiliza para indicar una venta.
El acuerdo es el último gran movimiento de Amazon y su carismático jefe ejecutivo Jeff Bezos, que hizo crecer a la compañía desde una pequeña librería en línea en la década de 1990 a un gigante global de venta minorista que ofrece una amplia gama de productos y crea premiadas transmisiones de entretenimiento.
“Millones de personas aman Whole Foods Market porque ofrecen los mejores alimentos naturales y orgánicos, y hacen que sea divertido comer sano”, dijo Bezos.
Se espera que la transacción se cierre en la segunda mitad de 2017, después de las aprobaciones reguladoras y el voto de los accionistas de Whole Foods.
Fundada en 1980 sobre la base del comercio justo y la alimentación saludable, Whole Foods sufre desde hace dos años una disminución de sus consumidores. La marca está presente en 41 estados de Estados Unidos, pero sólo en tres países (Estados Unidos, Canadá, Reino Unido).
AFP
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