En su intenso ‘lobby’, “gastan sumas astronómicas en publicidad, mercadotecnia y comunicación para hacernos creer que fumar es a la vez social y subversivo, que la libertad es precisamente poder fumar, que algunos cigarrillos pueden ser ‘light’ para la salud”, denunció la ministra francesa de Sanidad, Marisol Touraine.

También denunció que las grandes compañías tabaqueras financian generosamente “estudios para relativizar su impacto en la salud y pagan a científicos para usarlos de portavoces”, al tiempo que combaten “toda iniciativa gubernamental contra el cigarrillo”.

Citó como ejemplo el paquete neutro, es decir, sin distintivos de marca, obligatorios en Francia a partir del próximo primero de enero en virtud de una ley cuya aprobación fue perdiendo apoyos a medida que avanzaba en su tramitación parlamentaria, por consecuencia de la presión de las tabaqueras, según Touraine, hija del célebre sociólogo Alain Touraine.

“Debemos luchar contra nuestra propia inercia. Debemos resistir al intenso lobby de las tabaqueras. Debemos desmentir las contra-verdades según las cuales el tabaco llena la caja del Estado, mientras que en realidad su coste para nuestros sistemas de salud es más elevado”, dijo la ministra, y subrayó su compromiso con ese “combate”.

“Debemos tener la valentía de decir que una sociedad sin tabaco es posible y que la generación que nace hoy podría ser la primera en no fumar nunca”, escribió Touraine en una columna publicada en la versión francesa del Huffington Post con motivo de la Jornada Mundial sin Tabaco.

La titular francesa de Sanidad enumeró algunas de las dolencias asociadas al consumo de tabaco, que describió como “una promesa de enfermedad” que ocasionará la muerte a “uno de cada dos fumadores”.

“El tabaco es una destrucción masiva. Cerca de 60.000 europeos mueren cada mes por el tabaco: es el equivalente a todo un estadio una noche de partido en la Eurocopa. Eso es el tabaco”, señaló Touraine sobre una “droga” que consumen 122 millones de personas en toda Europa y 20 millones en Francia.

LO ÚLTIMO