Las grabaciones fueron conocidas y reveladas por el programa Los Informantes de Caracol Televisión, que en su emisión de este domingo evidenció como suboficiales y oficiales trabajan de la mano de los delincuentes más peligrosos y buscados de Bogotá.

Los ‘ganchos’, ‘capos’ y ‘Sayayines’ de la conocida ‘L’, acusado de tráfico de drogas, secuestros, prostitución infantil, desapariciones y asesinatos, eran respaldados por uniformados que recibían dinero a cambio de ignorar todas sus fechorías.

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Además, los ponían al tanto de cuándo las autoridades harían operativos para capturarlos, de acuerdo con el relato del coronel Douglas Restrepo, comandante de la Sijín Bogotá:

Cuando íbamos a hacer alguna intervención o un plan especial para tener información que nos sirviera judicialmente, veíamos que esta información se fugaba; los delincuentes tenían información de primera mano”.

Que algunos policías servían de cómplices a los delincuentes era un secreto a voces.

Sin embargo, la única cámara que pudo instalar la institución en una zona estratégica del Bronx (en el poste más alto para que los ‘Sayayines’ no pudieran romperla con piedras o pintarlas con aerosoles), puso al descubierto una situación que avergüenza y que como dice la periodista de ese programa Nena Arrázola: “Fue una bofetada para la Policía”.

“Habían muchos policías, especialmente de un CAI, que tenían relaciones con estos delincuentes y les hacían favores. Es una situación que a nosotros nos duele profundamente, es nuestra integridad, nuestro orgullo institucional y ver que estas personas van a delinquir con delincuentes de esta calaña, realmente lo entristece a uno”, afirma el coronel Restrepo a Los Informantes.

Los uniformados eran amigos de los criminales, les obedecían y les recibían dinero en bolsas, como se ve en las imágenes capturadas de los videos.

Policías recibiendo paquetes de 'Sayayines' del Bronx
Policías recibiendo paquetes de ‘Sayayines’ del Bronx / Captura: Los Informantes
Policías y 'Sayayines' del Bronx
Policías y ‘Sayayines’ del Bronx / Captura: Los Informantes

La estrategia de los videos entregó resultados más asombrosos. El comandante de los policías de la estación de Los Mártires, coronel Gerardo Rivera Gutiérrez, también se beneficiaba de la delincuencia que, se supone, debía combatir.

Coronel Gerardo Rivera, excomandante de la estación de Policía de Los Mártires
Coronel Gerardo Rivera, excomandante de la estación de Policía de Los Mártires / Captura: Los Informantes

En varias imágenes se le observa saliendo de la oficina principal de los ‘ganchos’, hablar con los ‘Sayayines’ y obtener paquetes.

Coronel Rivera saliendo de la oficina de los 'ganchos' con un paquete
Coronel Rivera saliendo de la oficina de los ‘ganchos’ con un paquete / Captura: Los Informantes

Este alto oficial, con más de 70 condecoraciones, fue trasladado al Putumayo, luego apartado de su cargo y destituido. Ahora, Rivera es investigado por la Fiscalía.

Otros abusos de autoridad también fueron grabados. Uno de los videos capta a 2 policías pegándole con sus tonfas a un habitante de calle desnudo. Luego de unos segundos uno de los ‘Sayayines’ interviene y los uniformados muy obedientes le entregan sus bastones.

Abuso de autoridad
Abuso de autoridad / Captura: Los Informantes

En una grabación se ve a un policía arrastrando a un indigente; de repente, le lanza un puño en la cara y con la ayuda de un compañero lo golpean a patadas.

Policía golpeando en la cara a un habitante de calle
Policía golpeando en la cara a un habitante de calle / Captura: Los Informantes

Otra imagen muestra a varios uniformados pintándole un pene en el rostro a un habitante de calle, mientras se limpian los zapatos con su ropa.

Uniformados le pintan la rostro a un habitante de calle
Uniformados le pintan la rostro a un habitante de calle / Captura: Los Informantes

La evidencias fueron contundentes contra las “manzanas podridas” de la institución, como dice el mismo comandante de la Sijín. Los hombres hallados responsables fueron destituidos y ahora están a la espera de un juicio por delitos de concusión, concierto para delinquir y narcotráfico.