Precisamente en una de esas citas fue que el suboficial retirado perdió el control, rompió uno de los puestos de incendios y sacó el arma para amenazar al personal médico y a los uniformados que prestan vigilancia.

Aunque una coronel y una psicóloga de la institución trataron de persuadir al hombre, solo consiguieron que se pusiera más agresivo e intentara atacarlas por la espalda con el arma, señaló City Noticias.

De acuerdo con el general Germán López, director de Sanidad Militar, el hombre “amenazó a las personas con la hacha y rompió algunas cosas. Llamamos a la Policía y atacó a estas personas”, dijo en entrevista con ese noticiero.

Jorge Anzola aseguró al informativo que solo exigía atención médica. “Fui a hacer un requerimiento de salud sobre un concepto de neurología que he solicitado por diferentes medios jurídicos, y no me han atendido”.

El exmilitar agregó que fue agredido por las autoridades. “Ellos me persiguen unos 25 metros y entrando a un conjunto cerrado me golpean con bolillo y puntapiés”

Sin embrago, el Ejército aseguró que se utilizó la fuerza para neutralizarlo.

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