Este Spider-Man abandonó Nueva York y ahora se pasea por el cielo de bogotano, fijando la atención de los conductores que esperan el cambio del semáforo en esta concurrida esquina de la capital.

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El sujeto vestido de rojo y azul no es Peter Parker, el fotógrafo detrás de la máscara del ‘Hombre Araña’, sino John Freddy Duque, de 26 años y nacido en Medellín, que se gana la vida con espectáculos callejeros de danza aérea.

“La gente se sorprende mucho, hay gente que alucina. ‘¡Ay, Spider-Man!’. Me gusta sentir que les saco una sonrisa”, dijo a la AFP.

Duque cuelga una tela blanca de unos 26 metros y aprovecha la altura del puente y la resistencia de la estructura para balancearse de un lado a otro y trepar con habilidad. Por supuesto, mueve las manos y dedos como si fuera a lanzar tela de araña.

Spider-Man en semáforos de Bogotá
Spider-Man en semáforos de Bogotá / Raúl Arboleda, AFP

Los niños le preguntan si realmente él es el superhéroe creado en 1962 por Stan Lee y Steve Ditko. Los adultos lo felicitan por el show que brinda en los pocos minutos que tarda en cambiar la luz de rojo a verde. En cada hora alcanza a hacer 20 números.

“Es como un momento de esparcimiento en Bogotá mientras estás en caos total”, explicó Camila Parra, una ingeniera geoambiental que observaba el show junto a su hijo.

Spider-Man en semáforos de Bogotá
Spider-Man en semáforos de Bogotá / Raúl Arboleda, AFP

Algunos transeúntes le piden a Duque que se tome una foto con ellos mientras, posa boca abajo y colgado de su ‘telaraña’. “Yo me divierto, en serio me gusta mucho”, apunta con una alegría.

Pero no solo vive de felicidad, aunque no tiene un horario fijo e incluso hay días en los que no se aparece por el lugar, Duque recolecta en promedio cerca de 30.000 pesos, por cada hora de acrobacias.

Spider-Man en semáforos de Bogotá
Spider-Man en semáforos de Bogotá / Raúl Arboleda, AFP

“La gente pone mucha atención en el número mío y pierden la concentración en comprar otras cosas de los vendedores ambulantes”, explicó.

Duque, a quien en ocasiones la Policía le impide hacer el acto por utilizar el espacio público sin autorización, practica su arte desde hace nueve años, pero hace tres se disfraza del ‘Hombre Araña.

“Solo quiero mostrar una buena habilidad, una buena técnica y poder brindar algo bien hecho. Tampoco como que me vean como un héroe”, afirma antes de lanzarse a una nueva aventura por el cielo bogotano.

Spider-Man en semáforos de Bogotá
Spider-Man en semáforos de Bogotá / Raúl Arboleda, AFP

Información AFP

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