“Hablé con presidente español @marianorajoy. No permitiremos que caso Electricaribe afecte óptimas relaciones diplomáticas y comerciales”, escribió Santos en Twitter.

El martes pasado, Colombia ordenó la liquidación de Electricaribe, filial de la española Gas Natural Fenosa (GNF), que previamente había sido intervenida por su precaria situación financiera y por no estar “en condiciones de prestar el servicio de energía con la calidad y continuidad que se requieren”, según las autoridades.

GNF, dueña del 85% de las acciones de Electricaribe, pidió dejar sin efecto la decisión, que consideró contraria a un acuerdo de libre comercio entre la UE y Colombia.

El gobierno español salió en respaldo de la compañía y el ministerio de Asuntos Exteriores dijo que apoyará a la firma “si decide hacer uso de los instrumentos jurídicos a su disposición”.

A su vez, Santos había avalado la liquidación y asegurado que la “prioridad es que ni usuarios ni empresas sufran por suministro de energía”.

Electricaribe, con más de 2,5 millones de clientes en el norte de Colombia, había sido señalada de reiterados incumplimientos y, según las autoridades, en promedio cada uno de sus usuarios carece de luz 92 horas al año.

GNF es el principal distribuidor de gas de Latinoamérica y el cuarto de electricidad.

Con AFP

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