Su regreso se produjo luego de que la Cancillería acordara su “repatriación humanitaria” con las autoridades chinas por su delicado estado de salud.

El viceministro de Asuntos Multilaterales de Colombia, Francisco Echeverri, manifestó en rueda de prensa que Galeano recibirá en Colombia los cuidados que requiere su “complicada” enfermedad, pero también cumplirá su pena, que ya ha sido disminuida en dos ocasiones.

La contraprestación es que la persona (condenada en el extranjero) llegue y cumpla su pena en su territorio nacional”,

aseguró Echeverri, después de recordar que a la colombiana le quedan por cumplir 18 años y tres meses de condena.

Estaba por fuera de Colombia por bruta porque cometí el error de irme con droga para China”,

dijo Galeano a periodistas tras su llegada a Bogotá, en donde aseguró estar “muy emocionada de estar en el país, no tengo palabras para expresar lo que siento en este momento”.

Recordó que fueron siete años, seis meses y una semana las que estuvo privada de la libertad en condiciones difíciles al recordar la dureza de las prisiones chinas, y agregó que “ellos tienen sus leyes y son muy estrictos, pero fue una experiencia más”.

Al ser preguntada por su experiencia de llevar drogas ilícitas a otro país pidió

por favor no arriesguen lo más hermoso que tienen, que es la libertad, el amor de la familia, esto es lo que más vale”.

Se manifestó también agradecida con el Gobierno colombiano y con el de China, que permitieron el cambio de prisión y destacó el empeño que puso en su caso la cónsul colombiana Juliana Ortega, de quien dijo luchó por su libertad.

Sara Galeano

Galeano es la segunda colombiana que el Gobierno de ese país logra repatriar desde China, una de las naciones con condenas más duras por tráfico de drogas, y en cuyas cárceles hay ahora más de 160 colombianos, según fuentes de la Cancillería.

Galeano estuvo privada de su libertad en el centro de detención de Dongguan, en la provincia china de Guandong, después de ser condenada a cadena perpetua por tráfico de drogas en 2010.

El viceministro Echeverri, quien agradeció enfáticamente al Gobierno chino su colaboración en este caso de repatriación humanitaria, exhortó a los colombianos a tener en cuenta que el narcotráfico es condenado con penas de muerte o cadena perpetua en más de 30 países.

“Tenemos un gran problema humanitario, miles de compatriotas, aproximadamente 8.000, está detenidos en cárceles en el exterior por causas de narcotráfico”, advirtió el funcionario.

Con EFE