Con el decreto 613 del 10 de enero de 2017, expedido por el ministerio, se autoriza el empleo de la semilla de marihuana para usos medicinales, y también para “evaluación, seguimiento y control de las actividades de importación, exportación, cultivo, producción, distribución y uso de la semilla”.

Con esta nueva reglamentación, el Gobierno también especifica el procedimiento de obtención de licencias para el acceso “seguro e informado” a la semilla.

Asimismo, el decreto explica que se conformará un “Grupo Técnico de Cupos” que realizará “el análisis, evaluación y seguimiento de todos los asuntos relacionados con la asignación de cupos o previsiones de cannabis para fines médicos y científicos”, agregó la información.

El Congreso aprobó en mayo de 2016 un proyecto de ley que reglamenta el cultivo, producción, fabricación, adquisición, importación, exportación, almacenamiento, transporte, comercialización, distribución, uso y posesión de las semillas de la planta de marihuana con fines medicinales y científicos.

Tras esta decisión, el Gobierno entregó a la compañía canadiense PharmaCielo la primera licencia para la producción y fabricación de derivados medicinales de la marihuana en el país.

Con EFE