La iniciativa, que lleva por nombre ‘Copa América Centenario por la Libertad San Diego 2016’, surgió de una mesa de trabajo con las detenidas en la que decidieron realizar un torneo paralelo dentro de la cárcel, que hace parte de los programas de resocialización con los que el centro fomenta del deporte, explicó el director del penal, Ramiro Cuadros.

El campeonato de las internas se va a alternar con unas jornadas académicas en las que, con la participación de historiadores, van a “hablar de los países que están presentes en la Copa América Centenario 2016”, explicó Cuadros a Efe.

“Nuestro campeonato quisimos hacerlo muy parecido al de verdad, pues las mujeres portan los uniformes oficiales de cada selección. También adecuamos el patio del penal con una cancha que si bien no cumple con las medidas reglamentarias sí permite a las internas realizar el torneo”, añadió.

El singular certamen deportivo, al que Cuadros catalogó como una “verdadera fiesta”, ha tenido acogida por parte de las autoridades y de los medios locales.

“A partir de la próxima semana se comenzará a transmitir en directo por algunas de las cadenas radiales de la ciudad”, comentó el director.

Durante la final del campeonato, que se llevará a cabo el próximo 27 de junio, igual que la Copa América Centenario, se entregará al equipo ganador “la copa de la libertad”.

Se trata de un trofeo dorado, de unos 50 centímetros de alto, que representa “un premio al empeño y al deseo de enmendar los errores que se hayan cometido y que se están pagando con la privación de la libertad”, explicó.

La cárcel distrital de San Diego alberga a 181 reclusas que en su mayoría pagan condenas relacionadas con tráfico de drogas, extorsión, paramilitarismo, homicidio y hurto calificado.

“También hay algunas extranjeras: una portuguesa, una mexicana y una uruguaya que están recluidas por narcotráfico”, agregó.

Por su parte, la goleadora del equipo que representa al seleccionado colombiano, Emilce Yepes, explicó a Efe que desde niña siempre le gustó el deporte.

“Aunque en algún momento practiqué softbol, al final me incliné más por el fútbol”, dijo.

Yepes, de 31 años, es madre de cuatro niñas y lleva dos años presa por “errores que uno comete en la vida”.

“Me ha ido muy bien gracias a Dios y me siento muy feliz por estar representando a mi país”, comentó la mujer con una inmensa sonrisa y confiada de que ya está “prácticamente afuera y en libertad”.

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