Los actos violentos serían cometidos por 60 personas que, desde las instalaciones de la universidad, bloquearían el tráfico en la zona de la calle 72 con carrera 13 para luego atacar con artefactos incendiarios 3 instalaciones bancarias cercanas a ese lugar , reseña Semana.
La revista añade que esos ataques fueron concebidos en marzo de 2014 bajo la denominación de ‘Operación Noche Buena’ y, aunque no fueron concretados, siempre estuvieron entre los objetivos del Eln para aterrorizar a Bogotá.
Incluso, dice la revista, en 2015 la organización que lideraba Bellón Galindo vinculó esa misma zona bancaria del norte de la capital en una serie de actos violentos en los que también se involucrarían ataques a algunos CAI de la Policía y bloqueos a Transmilenio.
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Cada una de estas acciones perseguía un fin político en el que la organización pretendía enviar “propaganda” a los habitantes de la capital.
“Esto en correspondencia con nuestra forma de ejercer la violencia, orientada a la defensa del pueblo y en correspondencia con un marco ético revolucionario“, destacó Semana.
La manera en que estos planes fueron concebidos, la inteligencia aportada para la financiación y el reclutamiento de los posibles perpetradores, con inclinaciones “camilistas”, revelarían mucho acerca de la incidencia del Eln en un plan para sembrar el caos y el miedo en Bogotá, subraya la publicación.
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