“La vida, para mí, siempre ha sido la música, pero el día que nació mi hija me di cuenta de que mi vida es ella”, dice Orjuela en un video publicado en YouTube y que se ha difundido de forma masiva.

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De acuerdo con Orjuela, los problemas con la mamá de la niña empezaron desde que él decidió formalizar su divorcio (ya llevaban un tiempo separados). La mujer no quiso conciliar, y él la denunció.

“Ella se fue a comisarías de familia a inventar un montón de calumnias. Dijo que yo las maltrataba a ella y la niña. Jamás en la vida yo les he faltado al respeto. Ni verbal ni físicamente las he maltratado”, asegura el joven músico.

Para recordar a la pequeña, Orjuela carga siempre con un osito de peluche que guardaba en su casa para las visitas de la niña.

Yo cojo este osito a veces en las noches y me imagino que es ella, y me duermo abrazándolo, acordándome de esas noches en que yo me dormía con ella en el pecho”.

El osito, de hecho, aparece en varios de sus videos musicales:

“Ella se sabía mis canciones. Las cantábamos juntos. Ella aprendió a cantar antes de pronunciar palabras”, añade Orjuela.

Este es su testimonio:

 

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