Del total, murieron 8 mujeres lesbianas, 43 hombres gay, 2 bisexuales, 27 mujeres transgénero y 7 hombres transgénero. Mientras que en los 21 homicidios restantes, no se pudo establecer su condición.
En el mismo año se registraron igualmente 12 tentativas de homicidio y otras 256 agresiones físicas contra esta comunidad, indicó la ONG que además explicó que los victimarios en muchos casos son bandas que pretenden “controlar los territorios, ‘limpiando’ a personas, colectivos y prácticas sociales, que ellos –en su estructura moral– consideran peligrosas para el orden social”.
“No son paramilitares, guerrillas o ‘bacrim'(bandas criminales emergentes), sino individuos u organizaciones delincuenciales que se aprovechan de la desprotección (…) principalmente de las mujeres trans para amedrentarlas, desplazarlas o incluso extorsionarlas”, apuntó la ONG.
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Por eso, la organización recomendó al gobierno de Colombia incluir un enfoque diferencial por orientación sexual e identidad de género en la Unidad Especial de Investigación de la Fiscalía y otros programas, tal como fue establecido en uno de los puntos del pacto de paz acordado en noviembre pasado con las Farc.
Ese acuerdo, firmado para acabar con un conflicto armado de más de medio siglo incluyó un enfoque de género y reconoció expresamente a las personas LGBT víctimas de la conflagración interna.
Con AFP
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