Humberto de la Calle, jefe negociador del Gobierno, quedó sorprendido cuando una hermosa joven vestida de novia se subió a la tarima en la que echaba su discurso y le propuso matrimonio.

La estudiante de Ciencia Política de la Universidad Eafit, Winny Muñoz, le entregó un ramo de flores y le dijo que lo hacía como muestra de que los jóvenes creen y están comprometidos con la paz.

Por su puesto, De la Calle aceptó la petición (de manera simbólica) y manifestó que con la paz es el único matrimonio en el que no habrá divorcio.