El colegio impartirá educación para los cursos de preescolar, básica primaria (primero a quinto), básica secundaria (sexto a noveno) y media (décimo y undécimo), y a él podrán acceder cerca de 960 estudiantes en jornada única, informa El Heraldo.

La idea de la jornada única está sustentada en que, según el presidente, si los estudiantes van solo 4 o 5 horas diarias al colegio, el resto del tiempo quedan vulnerables a la delincuencia y la droga, mientras que con 8 horas al día en el colegio los niños “salen mejor educados y hay más seguridad”, precisa la página de la Presidencia.

Según el citado medio barranquillero, varios de los asistentes a la apertura de la institución no ocultaron su molestia luego de que el presidente solicitara el cambio del nombre del colegio, sustentándose en el decreto 1678 de 1958, que prohíbe que bienes de uso público lleven el nombre de una persona viva.

Sin embargo, para calmar los ánimos, Santos afirmó sentirse “emocionado” por poner al servicio de la comunidad el colegio que, según él, “tendrá los mejores estándares”, y aprovechó para agradecerle al público el gesto de haberle “exigido” al alcalde de Soledad que el colegio llevara su nombre.

El acto de inauguración contó con la presencia del vicepresidente, Germán Vargas Lleras; la ministra de Educación, Yaneth Giha; la ministra de Vivienda, Elsa Noguera; y el alcalde de Soledad, Joao Herrera.

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