El insólito momento se presentó al finalizar la ceremonia de la Ascensión de Jesús al Cielo, en el Valle del Cauca, cuando asistentes y religiosos se disponían a guardar la escultura del Cristo Resucitado.

“Nos dimos cuenta que de Él salían dos rayas rojas, que eran como un signo donde chorreaba como sangre. Estaba seca, pero igual es un signo de fe, una llamada que Dios nos hace a buscarlo”, manifestó el presbítero de la parroquia Nuestra Señora del Carmen, Juan Diego Gómez, a un canal regional.

El sacerdote dijo que aunque no tiene una explicación para establecer cómo pudo haber ocurrido esta supuesta “revelación”, sí tiene claro que es un mensaje divino que demuestra que “Jesús está vivo, real y presente a través de la eucaristía y en la capilla del Santísimo”.

“Durante estos días también el Santísimo ha estado muy solo y Jesús también nos está llamando para decirnos que Él está resucitado y que quiere que lo sigamos acompañando”, manifestó el religioso.

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El alcalde de esa población vallecaucana, Rodolfo Vidal, dijo que de acuerdo a la información del sacerdote y de la comunidad las marcas rojas que tiene la escultura religiosa “no fueron pintadas por ninguna persona”, ya que en redes sociales se pone en duda y hasta se habla de que podría ser una broma.

“Tenemos una romería muy grande de feligreses que acuden a la iglesia a ver las marcas que tiene la imagen”, agregó el mandatario citado por Noticias Caracol.

Por el momento la comunidad espera un pronunciamiento de los altos jerarcas de la Iglesia Católica, ya que según el párroco la imagen es nueva y apenas llegó este año a ese templo.