Ricardo López contó que el pasado jueves sobre las 10 de la noche se llevó la sorpresa de su vida cuando vio, en una calle de la localidad de Kennedy, una bolsa de basura que se movía.
“Me causó curiosidad. Dentro había un bebé envuelto en una cobija. Lo saqué y me dirigí a mi casa. Lo destapamos con mi familia y vimos que era un varoncito. Llamé a una vecina que es enfermera y me dijo que tenía unas tres horas de nacido”, explicó López a Noticias Caracol.
El hombre asegura que al siguiente día llevó al recién nacido a un hospital, y que se encariñaron tanto en su casa que ahora lo quieren adoptar.
“Quiero adoptarlo con mi esposa. Tenemos un hogar estable y en mi casa hay niñas, pero queremos el varoncito. Tengo mi profesión y la capacidad económica en mi casa. Pero Bienestar Familiar me dice que no. Que no podemos adoptarlo porque eso no es tan fácil”, agregó López al noticiero.
El argumento, según ese medio, que expone el Instituto Colombiano de Bienestar Familiar (ICBF) es que en el país no existe la figura de adopción determinante, motivo por el que la familia López si puede iniciar un proceso para adoptar a un bebé, pero que no necesariamente le van a entregar al bebé que encontró.
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Esa misma situación se presentó en septiembre de 2016 en Barranquilla con una pareja que, así como López, encontró a un recién nacido abandonado en una bolsa de basura, y que también mostró interés en adoptarlo.
Sin embargo, según registró El Heraldo, el subdirector de Adopciones del ICBF, Eduardo Franco, explicó que el menor queda bajo competencia de una autoridad del Estado que es quien define si lo procedente es que el pequeño vuelva con su familia, o sea declarado en situación de adopción.
“De acuerdo a la ley 1098 y la Corte Constitucional, en Colombia la adopción determinada no existe. Significa que en Colombia las familias no seleccionan al niño, a quien quieren, porque es concebida como un derecho del niño y no de los adultos”, cita el medio regional.
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