Si bien la parte más dura de esta trama se presentó hace ya casi 10 años, El Espectador la ventiló por los desarrollos judiciales que ha tenido y porque los involucrados son prestantes miembros de la sociedad cordobesa y sucreña, respectivamente.

Comenzó como casi todas las historias de amor, y también terminó como casi todas las historias de amor: matrimonio, luna de miel los primeros meses, violencia física y verbal, comisaría de familia, separación, juzgados, fiscalía…

Pero la de Giovanna Paola y Walberto Antonio es una historia que tiene más ingredientes. En el escrito de acusación de una fiscal contra él, al que tuvo acceso El Espectador, la mujer asegura que su exmarido no solo la agredía físicamente, sino también sicológicamente, y de una manera muy particular.

Según Giovanna Paola, Walberto Antonio todo el tiempo se la pasaba diciendo que ella era una bruja, que vivía practicando brujería. “La acusa de darle y untarle cosas que lo tienen enfermo”, dice el documento judicial.

Pero Giovanna Paola dio más detalles de la escabrosa relación con Walberto Antonio. Relató a la justicia, según mismo medio, que “cuando se arrimaba a su lado, el acusado se retiraba y se echaba agua bendita haciendo la señal de la cruz con los dedos, situación que la afectaba emocionalmente”.

En la imputación de cargos contra Walberto Antonio, la fiscal revela otros pormenores que afectaron sicológicamente a Giovanna Paola: “El acusado la vive hostigando y filmándola a ella y a su familia en todo lugar, pues mantiene el celular en la mano. Que cuando está en la casa la escupe y cuando está durmiendo la despierta para filmarla y la obligaba a tener relaciones sexuales a la fuerza o después golpearla”.

Según Karen Juris, abogada de Giovanna Paola, Walberto Antonio sigue sometiéndola a agresiones físicas, verbales y psicológicas de manera frecuente y sistemática desde que cumplieron cuatro meses de casados, con el agravante de que no habían cesado a la fecha de la presentación del escrito de acusación.

“Las imputaciones hechas por la Fiscalía son basadas en afirmaciones falsas”, alega, por su parte, el abogado Andrés Guzmán, apoderado de Walberto Antonio. “Esperamos que podamos probar la inocencia del doctor Salgado y pueda vivir con su familia en paz, cerrando este capítulo de demandas y líos judiciales, sin abrir más odios y brechas entre quienes conforman este grupo familiar”.

El proceso ha seguido su curso normal en la justicia y el capítulo más reciente fue el aplazamiento, la semana pasada, de una audiencia, porque la Fiscalía no entregó completos los dictámenes que fundamentan las supuestas afectaciones que tiene Giovanna Paola, explica El Espectador. Y en medio de todo esto, el hijo de Giovanna Paola y Walberto Antonio, que debe estar viviendo una verdadera historia de horror.

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