Su sordera fue ocasionada por una meningitis, reportó Noticias Caracol. Pero su discapacidad no se convirtió en un obstáculo sino en una prueba de vida.

Su madre, Gloria Guzmán, la motivó a aprender a leer los labios, con el fin de que pudieran comunicarse. También, la instruyó en “reconocer las vibraciones de los sonidos, y a imitarlos”, indicó el noticiero.

“Mi mamá quería que yo pudiera aprender a leer los labios para poder ser profesional”, dijo la joven.

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Cañaveral, asimismo, desarrolló el habla, y se adaptó al lenguaje de señas.

En su adolescencia, entró a la Universidad La Gran Colombia, y 5 años después obtuvo el grado de arquitecta.

“A los 24 años, se convirtió en la primera mujer sorda en obtener un grado de arquitectura en el país. El título le costó muchas lágrimas, pero supo cómo hacerle el quite a la discriminación y al rechazo”, resaltó el informativo.

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Actualmente, la joven, que habla a la perfección el español, inglés y francés, y “se defiende con el sueco”, trabaja para el IDU y estudia una maestría en urbanismo en la Universidad Nacional, al igual que alemán, añadió Noticias Caracol.

Pero no solo eso. Ella, además, se desempeña como conferencista internacional en diversos temas, como inclusión, discapacidad, y emprendimiento, y está diseñando una aplicación llamada Connect City, con la que busca mejorar la interacción de los discapacitados en la ciudad.

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