Existe un ambiente de cordialidad entre los voceros del Gobierno y los líderes del ‘no’, y aunque eso no explique por sí mismo que se está allanando el camino para que las dos partes encuentren una fórmula que destrabe los acuerdos de La Habana, es un mensaje positivo que alivia la tensión existente tras el plebiscito del 2 de octubre.

“Tuvimos una reunión cordial con avances en un clima de discusión muy razonable”, señaló el jefe de la mesa de paz del Gobierno, Humberto de la Calle, en declaraciones recogidas por la agencia AFP.

Y agregó que existe “un clima positivo para encontrar un acuerdo nacional que le dé amplio sustento al posible nuevo acuerdo que se suscriba en La Habana”.

El jefe de la delegación oficial agregó que existen coincidencias, especialmente en lo que tiene que ver con la reforma del campo, que es uno de los puntos álgidos entre las diferencias de la oposición, y reiteró que el Gobierno planteará esas propuestas a los jefes de la guerrilla en Cuba.

“Dialogamos sobre reforma rural integral. Allí hubo varias coincidencias, siempre en el entendido claro está, como lo hemos dicho mil veces, que los acuerdos ocurren en La Habana entre la delegación del gobierno y la delegación de las FARC”, apuntó de la Calle.

A su vez, el expresidente Álvaro Uribe destacó en Twitter que el encuentro con el jefe negociador del Gobierno fue “una reunión constructiva” sobre la base de una serie de modificaciones a los acuerdos firmados el 26 de septiembre en Cartagena.

Zuluaga, por su parte, destacó que se lograron avances en temas relacionados con la reforma rural, y la participación política; pero sobre todo, que se abrió, según él, “una discusión amplia en el tema de elegibilidad política”, es decir, la papa más caliente de todas las que faltan por morder antes entrar a renegociar los acuerdos con las Farc.

El lunes continuará el diálogo entre las dos partes para, según el senador Uribe, “construir un Acuerdo Nacional para la paz”.

Con información de AFP

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