En su carta de despedida, expresa su última voluntad a sus familiares para que le permitan ejercer su derecho a morir por voluntad propia ante la imposibilidad de sobrevivir al grave cáncer que lo afectaba, y a su edad.

Así lo he decidido, con mi libre voluntad, en pleno uso de mis facultades mentales y conocimiento pleno de lo concerniente a la eutanasia como derecho autónomo humano fundamental”,

dijo Caldas en su carta, que se conoció 2 días después de su muerte, según publicó El Espectador.

En su carta, afirma que su decisión la toma plenamente

consciente y en pleno uso de mis facultades mentales y, por otra parte feliz y agradecido de haber vivido tan largamente la interesante etapa del mundo actual, rodeado de los que ama y he amado, soy consciente de la larga vida cumplida y del derecho que me asiste de elegir, sobre todo a mis 94 años, de la condiciones en que deseo que mi vida culmine, libre de dolor, de indignidad, en mi casa y rodeado de los míos”.

Y luego, en otro de los apartes de su carta señala que

si por algún motivo ajeno a mi decisión no se puede cumplir mi voluntad, expresamente me rehúso a que se den cuidados a mi acuerdo en estado vegetativo o se mantengan indefinidamente mis funciones vitales por medios artificiales”.

Caldas fue fundador de la empresa Legis y promotor de la Creación del Instituto de Ciencia Política.

La carta fue escrita el 17 de julio pasado y la eutanasia se aplicó dos días más tarde, sin ningún tipo de publicidad.

Se trata del segundo caso de eutanasia legal aplicada en Colombia que se hace público, por tratarse de una figura pública. En un año se han registrado otros siete casos.

El primero fue el de Ovidio González Correa, padre del caricaturista  ‘Matador’, fallecido hace poco más de un año.

Esta es la carta completa de Caldas:

Declaración de voluntad

Bogotá DC, julio 17 de 2016

Yo, Tito Livio Caldas Gutiérrez, mayor de edad y vecino de esta ciudad, identificado con cédula de ciudadanía # 92’785, consciente y en pleno uso de mis facultades mentales y, por otra parte, feliz y agradecido de haber vivido tan largamente la interesante etapa del mundo actual, rodeado de los que me aman y he amado, soy consciente de la larga vida cumplida y del derecho que me asiste de elegir, sobretodo a mis 94 años, de las condiciones en que deseo que mi vida culmine, libre de dolor, de indignidad, en mi casa y rodeado de los míos. Así lo he decidido, con mi libre voluntad, en pleno uso de mis facultades mentales y conocimiento pleno de todo lo concerniente a la eutanasia como derecho autónomo humano fundamental.

Si por algún motivo ajeno a mi decisión no se puede cumplir mi voluntad, expresamente, me rehúso a que se den cuidados a mi cuerpo en estado vegetativo o se mantengan indefinidamente mis funciones vitales por medios artificiales.

Tengo un cáncer agresivo que en esta hora de mi vida, con mayor razón, me produce pavor porque me vería sometido al sufrimiento de una enfermedad terminal y al deterioro indignante de mis facultades físicas y mentales. Desde muy joven pertenezco a un mundo intelectual racionalista y mi decisión es únicamente el resultado de mis propias convicciones, del ejercicio pleno de mi autonomía y libre voluntad y, en este caso, de la admirable jurisdicción de la Corte Constitucional que consagró a favor de los colombianos el derecho humano, pleno y autónomo a una muerte digna.

Tito Livio Caldas Gutiérrez

LO ÚLTIMO