Y no solo estaría engañando al plan de ayudas para personas de bajos recursos en el país, sino al programa ‘Ser pilo paga’ que fue creado para ayudarles con la educación a los jóvenes que carecen de recursos económicos, pero que cuentan con un alto desempeño académico.

Resulta que el concejal Quintero, del partido Liberal y que según la W Radio se gana unos 47 millones de pesos al año, tiene a su hijo estudiando en la Universidad de la Sabana desde hace tres semestres gracias al programa de ‘pilos’ que maneja el Gobierno.

Es decir, el concejal no saca un solo peso de su bolsillo para costearle el estudio al joven, ya que el funcionario tiene un puntaje en la encuesta del Sisbén de 28,33 puntos, lo que le permite mantenerse vigente en las becas del Gobierno y cumplir con los requisitos.

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Si bien Planeación Nacional estipula que un puntaje de 28 se le atribuye a una familia de bajos recursos o en condiciones de hacinamiento, la emisora reseña que el concejal Quintero no solo anda en una camioneta modelo 2013, sino que tiene una vivienda cuya propiedad supera los $220 millones.

En diálogo con El Tiempo, Quintero dijo que no está cometiendo ningún delito y que su hijo “tuvo muy buenos resultados en las pruebas Saber 11 y cumplía con el puntaje de Sisbén exigido”. Además, hizo este delicado señalamiento:

“En Cajicá, casi la mayoría de los concejales están sisbenizados. Yo con ese dinero que me gano sostengo a mi familia, que está compuesta por mi esposa y tres hijos”.

Aunque Quintero asegura en ese medio que las acusaciones son injustas y que todo se trata de “una persecución”, otra cosa piensa la ministra de Educación, Gina Parody, que anunció en la W Radio una investigación.

“Esto es gravísimo, de comprobarse que le está haciendo trampa al sistema se sacará de inmediato al beneficiado, porque al final esto es un delito”.

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