El supuesto acoso habría ocurrido el 25 de abril y fue denunciado un día después por la presunta víctima, Sandra Yáñez, asistente de investigación del profesor. En la queja ella indicaba que, según escribió El Tiempo, “durante una reunión convocada por Tovar, este le habría tocado los senos”.

Esa denuncia la recibió la entonces decana de la facultad de Economía, Ana María Ibáñez, que remitió el caso a gestión humana, donde iniciaron una investigación, recogieron pruebas, testimonios, y citaron a descargos al docente, “garantizándole el debido proceso a la defensa”, explicó Eduardo Behrentz, vicerrector de la reconocida universidad, a Blu Radio.

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Después de ese proceso, el 8 de junio, la dependencia determinó que a Tovar debían terminarle el contrato “por justa causa”, pues se “consideró inapropiada la conducta del profesor”, añadió Behrentz.

El despido se hizo efectivo este miércoles, confirmó la misma fuente en la emisora, y aclaró que la denuncia la interpuso la asistente de investigación de Tovar como acoso laboral y no sexual, pues en esta incluía otras anomalías.

“Ella en su queja dice varias cosas incluyendo un contacto físico […] Se queja de las horas en que él [el profesor Tovar] le pedía que ella trabajara en su oficina y la manera en que se llevaban a cabo las reuniones”, puntualizó Behrentz en el medio.

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