Frechette recuerda en entrevista a Jorge Gómez de El Espectador, que cuando fue a visitar a Álvaro Uribe, en su época como gobernador de Antioquia, él le dijo que las Convivir no le convencían, a lo que el entonces mandatario departamental contestó:
Es que no van a cargar armas. Serán personas de la región que estarán vigilando los bosques e informarán por radio que hay personas desconocidas en esos lugares”.
Ante esto Frechette, agregó en la entrevista:
No niego que me comí el cuento. Y con el pasar del tiempo me di cuenta de que era un señor extremamente hábil, pero muy creyente en lo de los paramilitares.
El exembajador está convencido que cuando Uribe, ya como presidente, se dio cuenta de que los gringos estaban oliéndose todo, entonces decidió el desarme de los paramilitares, indica este medio.
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Sin embargo, le cuenta a Gómez, que ese desarme no lo convenció, porque él recuerda que en ese pilón de armas que dejaron los paramilitares habían armas que eran nuevas cuando Napoleón fue Emperador de Francia, y añade:
a otro perro con ese hueso. Pero Uribe tenía apoyo en el Congreso y EE.UU. quería reducir la violencia”.
El expresidente se refirió en Twitter a lo dicho por Frechette:
Lo que hicieron después fue seguir operando desde otros lugares, según Frechette, y ahora ellos son lo que se dedican a la minería ilegal y a continuar con sus fechorías.
Él sugiere que detrás del asesinato de Álvaro Gómez Hurtado estuvieron los militares que le ofrecieron al exconstituyente pactar un golpe de Estado contra Ernesto Samper. Al inmolarlo borraron cualquier conexión con ellos. Ante esto, Frechette añade que los autores intelectuales siguen en Colombia y que aún no han sido detenidos.
La entrevista hace parte de un fragmento de una publicación que saldrá en los próximos días, afirmó Gómez.
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