Santoyo dice que, a través de la aplicación Rappi, hizo un pedido de un almuerzo que, en total, costaba 44.000 pesos.

Sin embargo, según la ciudadana, el repartidor le agregó un ‘antojo’ de 250.000 pesos (el supuesto Rolex), de manera que la cuenta subió a 294.000 pesos, descontados de la tarjeta de crédito de ella.

Rappi, en un comunicado, asegura que detectó el cobro irregular tan pronto ocurrió y que se comunicó con Santoyo para decirle que “en 24 horas tendría su dinero en la cuenta”.

La empresa afirma también que el ‘rappitendero’ (así llama a los repartidores) “fue desactivado de la aplicación” y que ya empezó a hacer “la respectiva investigación para poder tomar las medidas necesarias con las autoridades competentes”.

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La ciudadana, por su parte, dijo en Blu Radio que parece que fue algo de mala fe del mensajero y afirmó que se sintió bien con la respuesta de Rappi.

Sin embargo, para ella, lo grave de este asunto es que un repartidor “pueda manipular los servicios, subiendo, bajando los valores, sin que haya una autorización, así sea en la aplicación, por parte del usuario”.

El mensajero, además, ni siquiera llegó con el almuerzo, agregó Santoyo.

Este fue el escrito con el que la ciudadana, en Facebook, denunció lo ocurrido:

Facebook

Este es el comunicado de Rappi:

Comunicado de Rappi