La madre de las cuatro jóvenes apareció con signos de intoxicación y heridas de arma blanca en su cabeza y cuello, aunque permanece con vida en un hospital local.
Una versión citada por Radio Súper indica que la mujer habría atentado contra su vida y la de sus hijas —de 16, 14, 12 y 3 años de edad— “por la pena de haber sepultado a su padre” pocos días atrás.
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“Aún no sabemos qué o cuál fue la situación o qué clase de venenos o qué ingirieron”, dijo el concejal indígena Santiago Jiménez, citado por Noticias Caracol.
La Policía del Cauca informó a ese medio que, “según el hermano de la mujer, los hechos habrían sido producto de una bebida que ella preparó”.
Las autoridades indígenas declararon tres días de duelo en su comunidad.
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