El plebiscito que servirá para validar los acuerdos de paz con las Farc en Colombia, aprobado la víspera por la justicia, “es ilegítimo”, aseguró este martes el expresidente Álvaro Uribe, férreo opositor a la negociación con esa guerrilla comunista.

Así la Corte lo haya declarado constitucional, eso es ilegítimo y yo creo que todos estamos de acuerdo en que es ilegítimo”,

dijo Uribe en el programa radial “La Hora de la Verdad”.

El expresidente y senador se pronunció luego de que la Corte Constitucional declarara viable la realización de un plebiscito como mecanismo de refrendación del acuerdo final de paz, que el gobierno de Juan Manuel Santos firmará con las Farc para poner fin a medio siglo de conflicto armado.

Uribe considera que el hecho de “haber bajado el umbral (de participación) del 50 al 13%”, unos 4,5 millones de votos del censo electoral, para aprobar el acuerdo de paz “es una trampa del gobierno, pero el gobierno y el Congreso pueden hacer eso porque infortunadamente la Constitución del 91 no definió el umbral”.

Más tarde, cuestionó desde su finca en Rionegro, vecina a Medellín, que el plebiscito permita “una sola pregunta para tantos temas controversiales que el Gobierno oculta tras la cautivante palabra paz”.

Entonces, ¿qué sigue? Yo creo que nosotros no podemos quedarnos en la sentencia de ayer, aquí lo que hay que hacer es seguir denunciando la gravedad de lo acordado”,

dijo Uribe, quien anticipó que el 20 de julio su partido Centro Democrático se reunirá para decidir si apoyará una campaña por “no” o “la abstención” en el plebiscito.

Uribe, convencido de que el acuerdo permitirá una gran “impunidad”, aseguró también que “hay que seguir con una erguida, argumentada, repetida denuncia de la gravedad de los acuerdos de La Habana”.

Entre esos “peligros” mencionó en su declaración las zonas de concentración donde se ubicarán las FARC una vez firmado el acuerdo, que en su concepto serán “enclaves socialistas”.

Por razones semejantes el chavismo empezó con una combinación entre socialismo y economía privada, pero la tiranía incrementa la represión y anula los subsistentes vestigios de empresa privada a medida que avanza el fracaso y aumenta la pobreza”,

afirmó.

Las Farc y el gobierno negocian desde noviembre de 2012 un acuerdo de paz en Cuba.

El 23 de junio, las partes sellaron las condiciones del alto al fuego definitivo, el desarme de los rebeldes y convinieron acatar la decisión de la Corte sobre el mecanismo de validación del pacto final, que se espera firmen próximamente.

La Corte Constitucional validó la realización del plebiscito, que había sido propuesto por el gobierno y aprobado por el Congreso, a la vez que aceptó que para que el mismo se considere válido, los votos por el “sí” correspondan al menos a 13% del censo electoral.

Con AFP

Este es el texto de la declaración del expresidente:

“El Plebiscito: Lo formal y el peligro real

El peligro real es la aprobación de un acuerdo entre el Gobierno y la Farc que da total impunidad y elegibilidad política al narcotráfico y a otros delitos atroces del grupo terrorista. El peligro es tener zonas de concentración, que contrario a intenciones de paz, la Farc ha anticipado que serán enclaves socialistas. El peligro es considerar que el terrorismo es oposición política y reconocerle vocería en nombre de las minorías que piden ser reivindicadas. Por razones semejantes el chavismo empezó con una combinación entre socialismo y economía privada, pero la tiranía incrementa la represión y anula los subsistentes vestigios de empresa privada a medida que avanza el fracaso y aumenta la pobreza. El peligro es someter a las Fuerzas Armadas al Tribunal de la Farc y obligar a reconocer delitos no cometidos para evitar cárcel. El peligro es aprobar una justicia a la medida del terrorismo, justicia que expresamente niega cualquier modificación por fallos futuros de la justicia ordinaria, que podrían ser contrarios al terrorismo o favorables a las Fuerzas Armadas. El peligro es aprobar el Gobierno de Santos que es la cuota inicial de futuros gobiernos de Farc; Gobierno de Santos que tiene la decisión de imponer más impuestos pero después del plebiscito.

Lo formal es la tramposa reducción del umbral del plebiscito del 50% al 13%, que afecta la equidad en la participación política no obstante que se tramitó de conformidad con las leyes estatutarias. Lo formal es el hecho de tener una sola pregunta para tantos temas controversiales que el Gobierno oculta tras la cautivante palabra paz. Lo formal es la negación de recursos oficiales para publicidad del No o de la Abstención, y la coacción oficial a servidores públicos y al sector privado para el Si.

Lo formal y peligroso es que el Gobierno y los cabecillas de la Farc procedan como constituyentes. Seguramente, ahora que un eventual Si del Plebiscito no es vinculante al Congreso, pues solo lo es a la Presidencia, y que por ende no tendrá el efecto jurídico requerido para activar el Acto Legislativo Extraordinario que sustituye la Constitución, el Presidente y las mayorías del Congreso busquen otro atajo o acudan a la Reforma Ordinaria de la Constitución para buscar elevar los acuerdos con el terrorismo a normas Constitucionales Inmodificables.

El engaño es decir que el Gobierno es el primero en consultar con los ciudadanos lo acordado con el terrorismo, que obliga a recordar que en el anterior Gobierno no hubo negociaciones de la agenda nacional con el terrorismo y que los 53 mil desmovilizados se sometieron a la justicia.

Álvaro Uribe Vélez

Rionegro, Julio 19 de 2016.

 

 

LO ÚLTIMO