Hay que destacar la voluntad de la guerrilla en la fase de posplebiscito

Porque aceptó hacer los ajustes que los promotores del ‘No’ le presentaron al Gobierno y los incorporaron al nuevo acuerdo cediendo hasta los límites razonables, al menos así lo ve el exministro de Defensa y columnista de El Tiempo, Gabriel Silva Luján, para quien ya es más que claro que el Gobierno no le hizo ‘conejo’ al país.

Ahora les corresponde a esos mismos voceros que sembraron las inquietudes no hacerle conejo a la paz”.

El texto final de los nuevos acuerdos ya está disponible para que los colombianos lo estudien y estén al tanto de lo que se habla en Colombia cuando se trata de paz, refrendación e implementación de lo pactado en La Habana

Sí era posible un mejor acuerdo y no eran ciertas las predicciones apocalípticas

Pese al ambiente enrarecido que dejó el plebiscito del 2 de octubre (un país polarizado por la opinión) y las campañas basadas en verdades a medias, suposiciones, declaraciones ambiguas y toda suerte de acusaciones mutuas, finalmente el Gobierno y las Farc anunciaron un nuevo acuerdo y esa es la mejor noticia después de 39 días de incertidumbre, señaló Juan Lozano para El Tiempo.

La misma noche del 2 de octubre, tras escuchar declaraciones serenas y constructivas, de Álvaro Uribe, de Andrés Pastrana, de Marta Lucía y los líderes del No, del presidente Santos y de las Farc, expresé que el triunfo del No había que leerlo en clave de oportunidad y con esperanza frente a la construcción de un mejor acuerdo. Resalté la determinación de Uribe de levantar el teléfono y llamar a Palacio a pedir una cita con el Presidente. Aplaudí públicamente la convocatoria inicial de los estudiantes cuando invitaron por igual a los del Sí, a los del No y a los abstencionistas a la construcción pronta de un nuevo acuerdo. El posplebiscito ha sido fructífero”.

Estados Unidos, al elegir a Trump,  perdió toda su autoridad moral

La periodista Paola Ochoa dice que ya no hay motivos para sentirse mal por ser colombianos o argentinos, brasileros o venezolanos, porque con la elección de “un payaso misógino, xenofóbico, racista, ignorante y ordinario”, cualquier otra barbaridad que ocurra por estas latitudes, será un asunto menor dijo en su columna en El Tiempo.

Porque gracias al triunfo de Donald Trump en Estados Unidos, hoy sentimos menos vergüenza de Vivian Morales y su marido. Porque gracias a Trump, hoy nos da menos pena que la nueva Ministra de Educación no sepa nada de educación, que la costa Caribe esté a punto de entrar en un apagón, que el aeropuerto El Dorado colapse por un simple avión o que roben en una iglesia a unas señoras estrato seis durante su grupo de oración”.

¿Qué hará con tanto poder uno de los narcisos más grandes de la historia?

El escritor y periodista Heriberto Fiorillo lanza el interrogante a propósito de la sensación que dejó Donald Trump luego de su visita protocolaria a la Casa Blanca. “Donald no fue entonces otro, sino el mismo ganador relajado, en su etapa posterior al desenlace favorable del martes electoral”, comentó en su columna de este lunes en El Tiempo.

Aún no entiende el mundo por qué ganó Donald Trump la presidencia de los Estados Unidos y ya se asusta por lo que pueda hacer en el poder uno de los más grandes narcisos de la historia”.

Hay que seguir consultando a la oposición

Esa es la sugerencia que hace el diario El Tiempo al término de 40 días que duró el trabajo intenso de ajuste a los acuerdos firmados entre el Gobierno y las Farc. Un acuerdo que recogió la mayoría de las observaciones de los diferentes sectores opositores al mismo.

Por tal razón, es hora de hacer de tripas corazón y seguir adelante. Debido a ello, hacemos votos para que en cuestión de días quienes se sentaron a la mesa en Bogotá con los negociadores del Gobierno le expresen su apoyo a lo obtenido en La Habana. No es este el momento de mezquindades sino de grandeza, lo cual quiere decir que los intereses nacionales deben ponerse por encima de los de las colectividades”.

Los partidarios del ‘No’ tenían razón: era viable renegociar

El editorial de El Espectador presenta hoy 4 grandes conclusiones después del intenso periodo posplebiscito. Destaca la forma positiva con la que las Farc respondieron a los reparos de los promotores del ‘No’, los ajustes a temas que se consideraban cerrados e innegociables y la valiosa experiencia que dejó para el país el diálogo entre sectores enfrentados.

De nuevo, no sobra recordar que se trataba de una negociación, no una rendición, y que era necesario que todos los involucrados cedieran si en verdad el interés era conseguir un acuerdo plausible”.

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