Entre ellos están Francisco y Carlos Sales Pucccini, Oscar Javier Sandoval Estupiñán, Jorge Nempeque, Ronald Ramos Daza y Juan Pablo Robles, quienes fueron imputados por la Fiscalía por fraude procesal, falsedad en documento privado y concierto para delinquir.
“En síntesis, estos seis médicos habrían convalidado cursos breves en otros países haciéndolos pasar acá como especializaciones en cirugías plásticas”, dijo ayer El Espectador en un editorial sobre la convalidación de títulos, donde asocia esta práctica con las desfiguraciones que han sufrido mujeres, en especial, “por procedimientos que fueron realizados de manera negligente”.
Los médicos se exponen a la suspensión de la licencia.
La pertenencia a la Asociación es relevante porque cada vez que evalúa la idoneidad de un cirujano plástico la primera recomendación que se hacía era verificar que perteneciera a ella.
El Tiempo asegura que el origen del proceso es una carta que llegó a la Fiscalía con la denuncia el pasado 8 de julio.
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“Aunque en Colombia cualquier médico puede realizar cirugías estéticas, para la Fiscalía es claro que acudieron a medios no formales para obtener el título de manera irregular en Brasil”, dice El Tiempo.
Los médicos acreditaron horas de práctica que no habían cumplido.
El otro eslabón del caso es de qué forma convalidaron esos títulos ante el Ministerio de Educación, y si este fue engañado.
“Quedan dudas de que la cartera de Educación haya sido engañada, pues una de sus funcionarias, Leonor Herreño, aceptó haber recibido sobornos para agilizar el trámite de convalidación de médicos y hasta odontólogos”, dijo a El Tiempo la periodista Lorena Beltrán, activista por la reglamentación de los procedimientos estéticos.
De cualquier forma el Ministerio ya anunció que “de ahora en adelante solo se validarán los títulos de programas y/o instituciones de educación superior reconocidos oficialmente por las entidades homólogas al Ministerio en cada país y por sus sistemas de aseguramiento de calidad”, dice El Espectador en su editorial.
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