Según la investigación, 54 % de los consultados considera que el Congreso es la institución más permeada por la corrupción.

Le siguen el Presidente y sus funcionarios, con 48 %, y los Concejales, con 46 %.

La Policía está en el cuarto lugar (41 %) y los jueces y magistrados, en el quinto (37 %).

Cabe explicar que esta encuesta mide la percepción que los ciudadanos tienen sobre la corrupción, es decir, no se refiere a investigaciones o casos concretos que involucren a las instituciones.

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Este Barómetro Global de Corrupción 2016 se aplicó en 20 países latinoamericanos, y las cifras en Colombia revelan, entre otras cosas, que la ciudadanía está perdiendo la fe en las instituciones públicas.

A pesar de que todavía existe una alta disposición a denunciar delitos relacionados con fraudes al Estado o ‘triquiñuelas’ para evadir impuestos y hasta tener que pagar sobornos para recibir atención en salud, educación y justicia, la ONG explica que a la ciudadanía la desmotiva la tramitomanía que existe para denunciar a los corruptos.

Hace 3 años el porcentaje de quienes sí reportarían un hecho corrupto en el país era del 91 %, pero en 2016 bajó al 74 %.

De hecho, un 61 % de los encuestados cree que la corrupción creció entre 2013 y 2016, aunque existe la percepción de que la gente del común puede hacer “la diferencia en la lucha contra la corrupción”.

El 74 % de los encuestados creen que eso es posible, no obstante que el porcentaje de quienes están en desacuerdo con la idea de que la gente del común puede hacer algo contra la corrupción creció del 21 al 26 %, según la ONG.

Estos datos, que son muy valiosos en medio del desencanto y la desesperanza frente a los hechos de corrupción conocidos en el sector público, en la justicia y en el sector privado, nos indican que debemos elevar los niveles de sanción social y política a la corrupción”, señaló Andrés Hernández, director de Transparencia por Colombia.

Un dato no menor es que el 20 % de los encuestados admite haber pagado sobornos para recibir atención médica, educación, justicia y servicios públicos, según las cifras que entregó Transparencia por Colombia.

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