El total de personas afectadas asciende a 923, habitantes de tres municipios de Norte de Santander, frontera con Venezuela, informó hoy la Oficina de Coordinación de Asuntos Humanitarios de Naciones Unidas (OCHA). 

Los desplazamientos afectaron a familias que habitan en los municipios de Teorama, Hacarí y El Tarra que hacen parte del Catatumbo, una región en la que hay siembras de coca y hacen presencia grupos guerrilleros y bandas de narcotraficantes de origen paramilitar, entre otros. 

Según la OCHA en “las últimas 2 semanas de julio y la primera semana de agosto, se han presentado frecuentes enfrentamientos armados entre el Ejército y grupos armados no estatales”. 

Los hechos violentos, añade la información, afectaron a 655 personas de tres barrios de Teorama , seis de Hacarí, al igual que al caserío de San Isidro, en El Tarra, en donde fueron desplazados 268 habitantes. 

La mayoría de familias de Teorama y Hacarí se desplazan temporalmente en las noches para pernoctar donde familiares o amigos con el objetivo de evitar las acciones armadas, dadas la cercanía de sus viviendas con las estaciones de policía, y luego retornan a sus viviendas”,

explica la OCHA. 

Igualmente en San Isidro “las familias se desplazaron hacia la escuela, donde permanece un número de familias sin determinar”. 

Asimismo, algunos padres de familia han optado, como medida preventiva, no enviar a sus hijos a las escuelas. 

Las principales necesidades humanitarias para los desplazados están ligadas a los sectores de salud, protección y albergues.

Con EFE

LO ÚLTIMO