Los hechos ocurrieron el 19 de junio de 2016 en la capital de Córdoba por cuenta de la acción del fiscal especializado Mario Lora Correa, hijo del exmagistrado Jairo Lora, que reconoció su actitud. Sin embargo, sigue muy campante trabajando en el mismo cargo en Barranquilla.

Puntualmente, los disparos se produjeron en la calle 31 con carrera décima, uno de los sectores con más presencia de personas en Montería. En un principio, Camilo Andrés Rodríguez y Harold David Suárez, las víctimas, quedaron heridos, pero hace varios meses fallecieron, según relató Noticias Caracol.

Minutos después de atentar contra los jóvenes, Lora Correa fue capturado. Sin embargo, quedó en libertad y hasta el momento todo ha sido retrasos en el proceso, según relataron sus familiares a ese noticiero, que piden justicia.

El proceso ha pasado por 3 fiscales, dos jueces y hasta por la Corte Suprema de Justicia. Pese a esto, el juicio ni siquiera ha comenzado.

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Pero ahí no para todo. El mismo fiscal General de la Nación, Néstor Humberto Martínez, anunció a comienzos de este año una nueva audiencia de imputación de cargos y solicitud de medida de aseguramiento contra el fiscal que disparó, pero lo único que le han impuesto son algunas restricciones como no salir de su casa en ciertos horarios y no salir del país, según detalla Caracol.

El argumento que entregó Lora Correa a las autoridades es que disparó contra los dos jóvenes para defender a su hijo.

“Me vi en la imperiosa necesidad de sacar mi arma de fuego y desplazarme hasta donde ellos están agrediendo a mi menor hijo (…) y para defender su vida e integridad física, le hago un disparo a la persona que, sin razón alguna, lo estaba agrediendo (…)”, dijo el fiscal.

Sin embargo, Noticias Caracol cita a un patrullero de la Policía David Polo, que negó esta versión de los hechos que entrega el autor de los disparos.

El abogado que está encargado de la defensa de Lora, Guillermo Álvarez, dice que no sabe aún si su defendido mató a los dos jóvenes. El argumento que da es que aún no tienen la conclusión de las historias clínicas.

Así mismo, dijo que su defendido quiere llegar a un acuerdo con la justicia porque actuó en legítima defensa. Mientras eso pasa, seguirá en su cargo como fiscal.

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