Este artículo no busca elogiar su figura ni resaltar los atributos físicos de los detenidos, ya que varias de estas personas fueron capturadas por delitos graves.
Por el contrario, pretende llamar la atención sobre un fenómeno que marcó tendencia luego de que medios internacionales destacaran que el convicto Jeremy Meeks, de 32 años, se llevó elogios por una foto de su captura que publicó la Policía de Estados Unidos.
Meeks optó por ser modelo cuando estaba preso en una cárcel de California, y luego de pagar una condena de dos años comenzó su carrera de modelaje en firme en campañas publicitarias. Luego, en febrero, hizo su debut en una de las pasarelas más importantes del mundo de la moda: la de Nueva York.
Siete meses después en California el recluso Mekhi Alante Lucky, que tenía cada ojo de un color diferente, fue firmado por una agencia de modelaje.
Y en Colombia ocurrió algo similar, pues hubo varios capturados y detenidos que dieron de que hablar en las redes sociales y no precisamente por sus acciones y fechorías, sino por su atributos físicos.
El caso más llamativo fue el de la presentadora de televisión Paulin Karine Díaz García, implicada en el secuestro y asesinato de 2 comerciantes en Cali.
Según las autoridades, la mujer los habría distraído en una discoteca para propiciar el secuestro, y posteriormente “estuvo en los desplazamientos de traslado al sitio de cautiverio”.
Muchos de los comentarios en redes se mezclaron entre reprochar la conducta delictiva de la mujer y resaltar sus atributos físicos.
Algo similar ocurrió con Kathe Martínez, una DJ que se dio a conocer en el país luego de que se filtrara un video en donde ella exhibe su cuerpo dentro de una estación de Policía en Cali en estado de embriaguez.
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Según la mujer, que solo estaba en condición de detenida, fue obligada a desnudarse por los policías de turno y que presuntamente la chantajearon a cambio de retirarle las esposas y cederle una silla.
Luego del incidente, a Martínez le llovieron contratos para modelar y amenizar fiestas, mientras que los policías fueron investigados disciplinariamente y a la institución le tocó salir a ofrecer disculpas públicas.
Otro caso que llamó la atención fue el de dos jóvenes capturadas en Atlántico por el atraco a un taxista, ya que sonrieron y posaron en la foto de su captura.
Las dos eran amigas inseparables y se exhibían en Facebook con armas, en rumbas y hasta ‘ligeritas’ de ropa.
Apareció luego un joven que intentó atracar una sucursal bancaria de Davivienda, en Barranquilla, y la Policía se vio obligada a retirarle la camisa ante la amenaza de que portara armas.
Sin embargo, cuando lo sacaron esposado, varios curiosos empezaron a hablar sobre su atlética figura: “Ese ladrón se ve como sexy… Sólo digo (…) Parece modelo (…) Que le haga un taquillazo a mi corazón”.
El caso más reciente fue el de una jovencita de 19 años capturada por porte ilegal de armas de fuego en Barranquilla, y que llamó la atención por su belleza y por sus abdominales definidos.
Varios medios reseñaron la información y destacaron la esbelta figura de la mujer, identificada como Ana Sarmiento, algo que no fue bien visto por muchos tuiteros que se quejaron del enfoque noticioso.
Aun así, y a diferencia de los exconvictos de EE. UU., hasta el momento no se conoce que a los tres últimos capturados les hayan ofrecido contratos de modelaje.
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