Luego de que Fiscalía revelara un supuesto aporte de un millón de dólares a la campaña Santos Presidente, en 2014, son muchos los interrogantes que surgen y que ahora tendrá que resolver el Consejo Nacional Electoral (CNE), instancia que fue requerida por el fiscal Néstor Humberto Martínez para determinar cuáles fueron las irregularidades y sí hubo dineros de empresas extranjeras en la financiación de la campaña del actual mandatario.

Entre los detalles más importantes que llevan a armar el ‘rompecabezas’ desatado por el ente acusador este martes se destacan los siguientes:

  1. Un contrato sería la clave de la investigación.

Según revista Semana, la Fiscalía encontró que Bula firmó un contrato que garantizaba una comisión por 4,6 millones de dólares, si se lograba una adición. El excongresista, sin embargo, habría señalado al ente acusador que el contrato no fue real, sino que se inventó para tener argumentos para los giros.

“Según aseguró Bula, el contrato fue hecho en 2016, pero se escribió la mentira de que había sido firmado en 2013 para poder justificar el movimiento de semejante suma de dinero”, explica Semana.

Pero, ¿qué tiene que ver esto con la campaña de Santos? Según ese mismo medio, en esas mismas declaraciones apareció la campaña Santos Presidente porque de ese monto pagado en giros, un total de un millón de dólares entró proveniente de la firma Odebrecht, inmersa en el escándalo de corrupción por pago de sobornos a varios funcionarios públicos para la adjudicación de millonarios contratos como el del tramo II de la Ruta del Sol y el otrosí de la vía Ocaña-Gamarra.

  1. La Fiscalía lanzó la acusación, pero no hay pruebas.

De acuerdo con el diario El Tiempo, luego de que el fiscal Martínez hiciera la revelación del supuesto pago a la campaña por parte de la firma brasileña, el mismo presidente Santos lo contactó vía telefónica para preguntarle si hay pruebas para soportar la acusación. La respuesta del Jefe del ente acusador fue que “no”, según fuentes de Casa de Nariño, citadas por ese mismo medio.

  1. Otto Bula prendió el ‘ventilador’ porque busca beneficios con la justicia.

El Tiempo también asegura que el excongresta, que fue capturado en enero pasado y será acusado por la Fiscalía por los delitos de “cohecho” y “enriquecimiento ilícito”, pretende pagar su pena en una guarnición militar. Por esto, entre sus argumentos está la recepción de 2 giros pagados por Odebrecht, uno de ellos “habría” aportado a la campaña del actual Jefe de Estado.

  1. ¿Cómo se habría manejado el dinero?

Entre los detalles que Bula habría entregado a la Fiscalía se destaca que de ese millón de dólares se pagó una comisión del 10 % a un tercero, que ya fue identificado. Además, explica Semana, el dinero habría llegado a Colombia a través de una compañía china que se dedicaba a la importación de telas, pero que realmente sería una empresa fachada.

  1. La defensa de la campaña de Juan Manuel Santos.

Tras conocerse la acusación de la Fiscalía, el gerente de la campaña en esa época, Roberto Prieto, emitió un comunicado en el desmintió la versión y negó que se hubieran recibido fondos de la firma brasileña.

Incluso, dijo que las acusaciones de Bula son “infundadas, tendenciosas y calumniosas”. Y dijo que durante la campaña Santos Presidente no se recibieron donaciones para que los gastos se sufragaran con ingresos por reposición de votos, lo cual está soportado en estados financieros.

Prieto, además, aseguró que la versión del excongresista es un “intento de enlodar la campaña del 2014, al igual como se  pretendió hacerlo con la del 2010”, cita El Espectador.

Investigación del CNE y más de lo que viene en el caso Odebrecht

Además de determinar si el pago del millón de dólares se llevó a cabo, el Alto Tribunal deberá determinar si se violaron los topes de campaña.

“Si es verdad que entró un millón de dólares a alguna de esas dos campañas, lo primero que se buscará (el CNE) es determinar si el dinero de Odebrecht no se registró, se gastó por fuera y en ese sentido si superó los topes establecidos”, agrega Semana.

Además, dice, el Tribunal tiene que evaluar si se permitió la financiación de la campaña política por parte de una empresa extranjera, en este caso la supuesta compañía china fachada.

“Aunque es normal que las compañías financien las campañas políticas, el hecho de que esta sea brasilera convertía en ilegales los giros que se hicieran. Por esta razón, es que se utilizan personas jurídicas creadas en paraísos fiscales para mover la plata”, explica la revista.

La Fiscalía, por su parte, deberá retormar la investigación y abrir procesos penales a las personas que habrían participado en los manejos irregulares de dinero en las campañas.

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