Estas personas serían las encargadas de “financiar y administrar 40 dragas” utilizadas para minería en Chocó, y según la Policía Nacional dos de los cabecillas capturados son de nacionalidad brasilera.

En la operación se “incautaron 245 millones de pesos  y 11 mil dólares”, así como maquinaria pesada con la que se extraía el oro.

El informe policial apunta a que los ‘Dragones’ y sus socios, entre los que habría funcionarios del gobierno local, instalaron “dragas indiscriminadamente sobre el afluente, y con el vertimiento de mercurio y cianuro aceleraban la extracción ilegal de oro”.

Igualmente, crearon ‘empresas de papel’ para asegurarse de que el mineral explotado quedara en sus manos.

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Esta práctica de contaminación desató una emergencia ambiental que afectó a las comunidades que habitaban allí y que se abastecen de ese río, al punto que 37 niños murieron en 2015 por aparente consumo de agua con mercurio.

Por eso, el director de Seguridad Ciudadana de la Policía, general Jorge Rodríguez, confirmó en RCN Radio que estas muertes “están relacionadas precisamente con el consumo de agua contaminada por mercurio que es utilizado en el amalgamiento del oro obtenido a través de estas dragas”.

Uno de los cabecillas, José Antonio Calvacante, había sido capturado en 2014 “por contaminar el río Quito”, y según las autoridades extrañamente recuperó su libertad días después y la investigación se archivó.

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