Sisy Gabriela Arias era una joven de 27 años y madre de dos hijos que hacía parte de la tripulación del vuelo en el que viajaba la delegación brasileña hacia Medellín. También, una de las 71 víctimas que dejó el siniestro.
La joven dedicó parte de su vida al modelaje y luego trabajó en un canal de televisión, pero su pasión por los aviones la llevó a estudiar aviación en Estados Unidos.
Su padre, el periodista y director del canal Gigavisión en Bolivia, Jorge Arias, llegó a Colombia para recoger los restos de la joven y contó, a Noticias Caracol, que ella “estaba muy entusiasmada porque era su primer vuelo como auxiliar de la tripulación”.
Ese entusiasmo con que Sisy Arias subió al avión es el mismo que mostraba al hablar de su profesión como auxiliar a bordo, de su pasión por los aviones, por estar en el aire, como se aprecia en una entrevista concedida en julio de este año al portal boliviano El Deber.
Desde el momento en que chequeo el avión antes de despegar, para ver si está en buenas condiciones, es inexplicable. A veces pensás que un motor puede fallar y que quizás sea la última vez que estás en el suelo, pero luego recuerdo que puedo irme donde sea, y la sensación de estar arriba es increíble”.
Asimismo, Arias hizo una comparación entre la labor como periodista, a la que se dedica gran parte de su familia, y a la que desempeña la tripulación cuando decide abordar un avión con decenas de pasajeros.
Antes trabajaba con mi papá porque tenía que hacerlo, no por gusto. No me agradaba estar en una oficina y la comunicación no me llama la atención para nada (…) Mi mente está en los cielos o en ir a correr, no me gusta vivir presionada (…) Los pilotos tienen las vidas de cientos de personas en sus manos. Eso es presión…”.
En la entrevista, con el medio boliviano, la joven se refirió al amor que siente por su familia, especialmente por su padre, y lanzó una frase que hoy podría interpretarse como algo premonitorio.
“Es mi estrella, mi ángel guardián, el hombre que siempre he admirado, mi superhéroe (…) Lograba que me sienta respaldada. Es mi todo, si se muere, me meto al cajón con él”, dijo, y seguidamente habló de su esposo y de sus dos hijos.
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