La Fiscalía y un juez de Paloquemao se habían tomado su tiempo para librar la orden de captura porque investigaban y ataban cabos con el propósito de que otras personas que estarían implicadas también fueran cubiertas con la medida.

Sin embargo, no le dieron más largas al asunto y a las 10:00 de la noche de este lunes expidieron la orden de captura, que hicieron efectiva agentes de la Sijín que habían llegado una hora antes a la Clínica Vascular Navarra, en el norte de Bogotá. Decenas de uniformados se tomaron ese centro asistencial, que ya tenía presencia de policías que custodiaban sin capturar a Uribe Noguera.

El coronel Restrepo llegó hasta la cama donde se recupera de una sobredosis de estupefacientes Uribe Noguera y sostuvo el siguiente diálogo, en el que leyó los delitos por los que lo requiere la justicia.

—¿Me hace un favor? ¿Me confirma su nombre? —inquiere el funcionario judicial al sindicado.

—Rafael —responde como sin aliento el hombre en la cama.

—Nombre completo —pide el funcionario.

—Rafael Uribe.

—Completo el nombre —insiste el oficial.

—Noguera.

—¿Sabe su número de cédula?

—79948528.

—Bueno, señor Rafael Uribe Noguera, lo notifico de una orden de captura número 37, emanada por el Juzgado 20 Penal Municipal con función de control de garantías —continúa el miembro de la Sijín—. Esta orden está expedida el día de hoy en su contra por el despacho que ya le manifesté. Así mismo, le vuelvo a confirmar su nombre: Rafael Uribe Noguera, identificado con cédula 79948528 de la ciudad de Bogotá. 38 años de edad.

Y agregó: “Lo estoy notificando sobre unos hechos que sucedieron el día cero cuatro de diciembre de 2016, por el delito de feminicidio agravado, Artículo 104 B del Código de Procedimiento Penal; secuestro simple, Artículo 168 y 170, numeral 2, del Código de Procedimiento Penal; acceso carnal violento, Artículo 205 y 211, numeral 7, del Código de Procedimiento Penal; asimismo tortura, Artículo 278 del Código de Procedimiento Penal”.

El sindicado escuchó atento los cargos y firmó el documento en el que quedó constancia de la diligencia judicial. Después, fue esposado a la camilla donde se recupera y el cuarto quedó bajo custodia de la Policía. A partir de ese momento corre un lapso legal de 36 horas para que la justicia demuestre que Uribe Noguera es responsable del hecho.

La captura se produjo este lunes en la noche en la Clínica Vascular Navarra, en cuyas inmediaciones permanecen decenas de personas que exigen justicia pronta para este caso que estremece al país.

Los hechos en los que murió la niña Yuliana Samboni Muñoz ocurrieron el domingo pasado por la mañana, cuando desapareció del frente de su casa en el Barrio Bosque Calderón, en la localidad de Chapinero.

Los padres de la menor interpusieron de inmediato la denuncia, a partir de la cual las autoridades comenzaron la búsqueda. Las indagaciones permitieron identificar el vehículo en que había sido raptada y el apartamento en donde posteriormente fue hallada muerta.

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