Según los nuevos detalles revelados por una Corte del Distrito sur de la Florida, citados por Noticias Caracol, Moreno y el abogado Leonardo Pinilla mordieron el anzuelo desde noviembre, cuando le ofrecieron a Lyons “una copia de las declaraciones tomadas en Colombia a testigos en su contra”, que forman parte de los procesos de la Fiscalía contra el exgobernador en el país.

Ya en 2017, Pinilla insistió en el ofrecimiento a Lyons, argumentando que todo estaba listo para su captura y que la idea era ayudarle. El exgobernador aceptó, relata Caracol Radio.

Lo que no sabían Pinilla y Moreno era que Lyons había decidido cooperar con la justicia estadounidense y grabó de manera clandestina sus siguientes encuentros.

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“Una de las grabaciones clave en la investigación de los agentes federales se dio en inmediaciones de Doral, estado de La Florida; en el interior de un vehículo se citaron los dos implicados con el colaborador de la DEA, Alejandro Lyons”, y le pidieron 100 millones de pesos el pasado 15 de junio, fecha en que Moreno “también tenía programada una charla ante el servicio de recaudación de impuestos de Estados Unidos, sobre la lucha contra la corrupción en Colombia”, según el texto de la Corte.

Un día más tarde, en el baño de un centro comercial, Lyons les entregó un sobre de manila con un anticipo de 10.000 dólares (unos 30 millones de pesos), previamente registrados y marcados por la DEA, con el fin de detectar si había otros funcionarios implicados.

“Parte de ese dinero les fue encontrado a familiares del fiscal Moreno cuando llegaron al aeropuerto El Dorado de Bogotá, procedentes de Miami”, resalta Noticias Caracol.

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