Los siguientes casos son de estudiantes, profesionales y trabajadores, en resumen personas de bien, que se encontraron con la cruel voracidad y brutalidad de quienes campean por la capital a sus anchas.
Las víctimas, muchas de ellas padres de familia, se enfrentaron a los ladrones que, con cuchillo o disparos, le pusieron fin a sus sueños, sus proyectos y su vida. De paso, causaron daño y tristeza en muchas familias.
Lo grave es que la mayoría de estos crímenes, que son apenas una muestra del delito que más azota a la ciudad, continúan en la impunidad, porque, según la Sijín de Bogotá, son los más difíciles de resolver por falta de testigos y ausencia de cámaras que revelen los rostros de los asesinos.
1. Leonardo Castillo Zapateiro
Este ingeniero de sistemas, de 28 años, fue asesinado con arma de fuego, el pasado 31 de enero. La víctima caminaba por el sector de La Carrilera (Fontibón) junto a su esposa y su bebé, de pocos meses de nacida, cuando dos delincuentes se percataron de que estaba hablando por celular y lo interceptaron.
Castillo Zapateiro, oriundo de Barranquilla, en un acto de valentía, intentó evitar el robo del teléfono y recibió un disparo en el pecho. Han pasado más de 10 meses y los delincuentes continúan libres.
2. Ronald Alejandro Lozano Basto
Tenía 17 años y vivía en la localidad de Bosa con sus padres y sus hermanos. A las 6:30 a.m. del pasado 16 de marzo, Lozano acompañaba a su hermanita (de 13 años) al colegio, cuando fueron intimidados por cinco jóvenes que intentaron hurtarle la maleta y el celular a la niña.
El joven se enfrentó a los delincuentes y uno de ellos le propinó una puñalada en la espalda. Los vándalos no se llevaron nada de valor, pero le causaron la muerte al adolescente. Aunque en el sitio había cámaras de seguridad, la investigación sigue en proceso.
3. Brayan Leonardo Delgado Martínez
Este estudiante de música fue asesinado de una puñalada, a pocas cuadras de su casa en Kennedy, en la mañana del 10 de julio. Delgado Martínez, de 20 años, forcejeó con un delincuente que quería robarle el teléfono y una maleta.
En la pelea por salvar sus pertenencias, Brayan Delgado recibió una puñalada en la espalda que le perforó el pulmón y causó su muerte. El hecho violento ocurrió a plena luz del día y muy pocos testigos dieron información del criminal.
4. Nilson Méndez Suárez
El albañil, de 45 años, tomaba unos tragos en una calle de Ciudad Bolívar, sur de Bogotá, cuando una mujer se le acercó para sacarle el celular de su bolsillo.
Méndez Suárez se percató del robo, le reclamó y la siguió unas cuadras. Sin embargo, cuando estaba a punto de alcanzarla para reclamarle el teléfono, ocho sujetos aparecieron y lo atacaron a puñaladas. Murió en la madrugada del 12 de julio.
5. Édgar Gómez Hortúa
Era asesor comercial de Panamericana y tenía 29 años. El pasado 11 de agosto, caminaba por el sector de Galerías hacia su trabajo y tenía el celular en la mano. Un ladrón, al darse cuenta, se le acercó, lo golpeó con la cabeza para desestabilizarlo e intentó quitarle el aparato electrónico.
Édgar Gómez reaccionó y forcejeó con el sujeto, pero este lo atacó y le propinó tres puñaladas. El criminal huyó en una moto que lo esperaba, mientras el joven murió en la Clínica Palermo. Transeúntes y comerciantes denuncian que el sitio es un foco de delincuencia.
6. Steven Real Guerrero
Este estudiante de bachillerato (de 18 años) y un sobrino (de 15 años) salían de una fiesta en Usme (sur de Bogotá), en la madrugada del domingo 28 de agosto. Mientras caminaban hacia la casa fueron interceptados por seis delincuentes que les pidieron los celulares.
Steven Real y su familiar, por evitar el atraco, salieron a correr, pero el menor tropezó y cayó al suelo. Real Guerrero se devolvió por su sobrino y fue apuñalada por los ladrones. El otro joven también resultó herido.
7. Diego Mauricio Lozano Muñoz
El ingeniero de sistemas del Dane fue asesinado de una puñalada en el pecho, en la noche del viernes 10 de septiembre, cuando caminaba a su casa en Castilla (Kennedy). La víctima se opuso al hurto de su celular, pero el ladrón lo atacó y se llevó el aparato.
Las autoridades encontraron a Diego Mauricio tendido en el suelo y con unos audífonos colgando de su cuello. En el hecho violento no hubo testigos y sus familiares han clamado justicia, pero el delincuente sigue libre.
8. Jairo Nelson Agudelo Fuentes
Este subcomisario de la Policía, de 43 años, recibió dos disparos por resistirse al robo de su teléfono y unas pertenencias.
Agudelo había salido de su casa, en el barrio Bachué (Engativá), en la mañana del sábado 24 de septiembre para hacer ejercicio. De regreso a su hogar fue interceptado por dos bandidos que lo asesinaron. Los rostros de los criminales quedaron grabados en las cámaras de seguridad del sector.
9. Óscar Armando Garzón Piraquive
Mientras esperaba un bus en el sector de San Victorino, centro de Bogotá, el joven, de 24 años, sacó del bolsillo su celular de alta gama. El teléfono llamó la atención de un ladrón que de inmediato le exigió que se lo entregara.
Garzón ocultó el aparato y forcejeó con el delincuente para evitar el robo, pero este le propinó una puñalada en el corazón que le quitó la vida. El asesino huyó con el celular.
10. Ómar Alberto Ochoa Casas
Llevaba pocos meses de casado, era padre de familia y conductor de un bus del SITP. Ochoa Casas fue asesinado en la noche del pasado 20 de octubre, en la localidad de Ciudad Bolívar, por sujetos en moto que le dispararon en el cuello por no entregar el celular.
La víctima acababa de guardar el bus en un parqueadero cercano y siempre caminaba hacia su casa por la misma ruta. Los ladrones no alcanzaron a llevarse nada porque los vecinos salieron de las casas. Pese a que en el sitio hay cámaras de seguridad el crimen sigue sin justicia.
Cifra: De acuerdo con un reporte de Medicina Legal, en el país, anualmente, 40 personas pierden la vida por evitar alguna clase de atraco. Sin embargo, el robo preferido por los delincuentes son los celulares.
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