Las autoridades judiciales colombianas localizaron en Bogotá los restos de una persona desaparecida en 1985 después de que el Palacio de Justicia, que fue tomado por el extinto grupo guerrillero M-19, fuera recuperado por militares y policías, informaron hoy fuentes oficiales.

La Fiscalía General de la Nación confirmó el hallazgo durante la entrega en Medellín (noroeste) de 14 restos óseos de víctimas del conflicto armado colombiano.

 

Dentro de los restos identificados “se encuentra una víctima de la toma del Palacio de Justicia, perpetrada en noviembre de 1985 en Bogotá”, reveló la institución.

El subsecretario de Derechos Humanos de Medellín, Carlos Arcila, precisó que se trata de Ruth Mariela Zuluaga, secretaria del magistrado Carlos Medellín, quien según algunas versiones fue sacada del Palacio de Justicia y llevada a un hospital con quemaduras.

“Fue plenamente identificada esa víctima de la situación que se vivió en el Palacio de Justicia. Este proceso se encuentra en la Corte Interamericana de Derechos Humanos (CorteIDH)”, declaró Arcila a periodistas.

El funcionario precisó que los restos de Zuluaga fueron encontrados en “un cementerio de Bogotá y serán entregados a sus familiares en Medellín en una ceremonia privada, que tendrá una eucaristía de homenaje”.

La toma del Palacio de Justicia, ubicado en pleno centro de la capital colombiana, comenzó el 6 de noviembre de 1985, cuando un comando de 35 guerrilleros del M-19 irrumpió en el edificio y tomó como rehenes a cerca de 300 personas.

Un día después el Ejército retomó a sangre y fuego el recinto, que albergaba la Corte Suprema de Justicia y el Consejo de Estado, en una operación que dejó 94 muertos, entre ellos once magistrados de la Corte, decenas de heridos y once desaparecidos, en su mayoría empleados de la cafetería y visitantes.

De otra parte, la Fiscalía realizó hoy la entrega de restos de 14 personas que fallecieron entre 1987 y 2015 a manos de diferentes actores del conflicto armado colombiano.

Las víctimas, con edades que oscilan entre los 17 y los 59 años, fueron exhumadas por funcionarios del Cuerpo Técnico de Investigación con el apoyo del Ejército y la Policía Nacional, en los departamentos de Antioquia, Nariño y Valle del Cauca.

“Luego de varios meses de labores de campo, laboratorio e investigación, fueron entregados a sus seres queridos 14 restos de personas que fueron asesinadas y desaparecidas. Hay víctimas de todos los grupos armados ilegales que delinquían en el país”, dijo el fiscal especializado de la Dirección Nacional de Justicia Transicional de la Fiscalía, Gustavo Andrés Duque.

Algunos de esos asesinatos son investigados por la justicia penal militar.

Además de la ceremonia judicial, los familiares de las víctimas participaron de un acto religioso con el que rindieron homenaje luego de terminar un ciclo “lleno de zozobra”, como le sucedió a Margot Orozco García, a quien le entregaron los restos de su hermano José Orozco, desaparecido hace 16 años en Medellín.

“Lo encontraron enterrado a dos cuadras de donde él vivía, en el barrio Santo Domingo. Siento un dolor muy fuerte, pero también es una manera de descansar porque se termina un ciclo y esa zozobra que tuvimos por años”, dijo a Efe Orozco.

Con EFE