La institución, con sede en Santander (España), había fijado para el próximo 5 de julio la fecha de entrega, según acordó el Consejo de Gobierno de la Universidad, informó la Cadena SER.

La concesión de la medalla a Uribe por su liderazgo político y defensa de los derechos humanos en Iberoamérica, según informó la Universidad el pasado 8 de junio, despertó críticas entre organizaciones no gubernamentales y movimientos sociales.

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Manuel Corbera, de la Asamblea Cántabra por las Libertades y contra la Represión dijo en declaraciones a esta cadena española que la presión que ha ejercido su colectivo y posiciones como la del presidente regional Miguel Ángel Revilla, que ya anunció que no acudiría al acto, están detrás de esta decisión.

Corbera afirmó a SER:

Magnífica esta reacción, porque no nos parecía adecuada la entrega de un reconocimiento de estas características por parte de una universidad pública a una persona con cargos por crímenes y diferentes acciones de espionaje y acoso”.

La Universidad tiene una larga tradición en distinciones a exmandatarios como Belisario Betancur o Michelle Bachellet, que se basan en la trayectoria institucional y académica de los galardonados sin ningún carácter político ni relación con sus posiciones en los asuntos internos de los países, por eso consideró oportuna su anulación, concluyó la institución.

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