La nueva fecha fue confirmada este miércoles por el presidente del Senado, Mauricio Lizcano, que señaló que la anticipación del proceso se hizo en acuerdo con los voceros de los partidos políticos.

Según Lizcano, la decisión de adelantar la elección obedece a que “para la fecha ya se habrán cumplido todos los requisitos de meritocracia”, y porque también considera que “de esta manera  se enviará un mensaje  de confianza al país, eligiendo lo más pronto posible al procurador”, indica un boletín publicado en la página del senador.

Pero más que un ‘mensaje de confianza’, hay varias razones que llevaron a adelantar esta fecha. Una de ellas, según El País de Cali, es para que el candidato ganador cuente con un respaldo mayoritario entre los partidos de la coalición de Gobierno.

Esto, porque ese respaldo podría verse afectado por la discusión de la reforma tributaria que se dará en noviembre, pues varios partidos del Gobierno, especialmente el liberal,  “han empezado a expresar sus críticas al ajuste de los tributos”.

También, dice El Espectador, como prácticamente el elegido sería el exministro Fernando Carrillo, “se ha rumorado que la decisión de Lizcano tendría que ver directamente con la reforma tributaria y el apoyo que las bancadas le darían a la misma”.

Es decir, porque los partidos que apoyan a los candidatos que resulten derrotados “pondrían palos en la rueda para la aprobación del proyecto del Ministerio de Hacienda”, agrega Caracol Radio.

Así las cosas, el impreso capitalino dice que al precipitar la elección “el gobierno estaría buscando un margen de maniobra y poder controlar el descontento azul (de la bancada conservadora) que les resultaría el fracaso de la elección de (la exmagistrada María Mercedes) López como nueva procuradora general”.

Además de Carrillo y López, el otro candidato es el exvicefiscal Jorge Perdomo.

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