El material estaba oculto en un edificio de la carrera 16 con calle 93, en donde funciona un laboratorio de la farmacéutica Novartis.

“Encontramos unos elementos explosivos que estaban entre una caja. Los están analizando para identificar qué material es (…) La situación ya está controlada”, dijo extraoficialmente un agente antiexplosivos a Pulzo.com.

Asimismo, personal de la Policía advirtió que el desalojo de varios edificios se realizó por motivos de seguridad, y que no se trató de un simulacro como muchas personas llegaron a creer en un principio.

Por su parte, Caracol Radio informa que preliminarmente se habla de que el explosivo de “alto poder” sería “amonal”, y que pretendía ser activado por medio de un celular.

Lo cierto, hasta ahora, es que al menos dos cuadras a la redonda fueron acordonadas por personal de la Policía, Bomberos, antiexplosivos, Idiger y Fiscalía, que recogieron el material hallado para su posterior análisis.

El personal que trabaja en ese edificio y en otras oficinas aledañas entró en pánico al saber que la nueva orden de desalojo, después de haber cumplido con el simulacro nacional, era por una amenaza de bomba.

“Nosotros pensamos que era por lo mismo del simulacro, y no queríamos bajar, cuando empezaron a gritar que era por una bomba (…) La gente se asustó mucho y más cuando vieron llegar camionetas con policías y hombres de antiexplosivos”, comentaron varias personas a este medio, mientras esperaban la autorización para retornar a sus labores.

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