Según lo acordado por el Gobierno y las Farc, serán 23 zonas de concentración que —explicó Barreras— representan el 0,07% del territorio nacional. Puntualmente, se trata de fragmentos veredales.

“Son zonas muy pequeñas que no tendrán más de 5 kilómetros cuadrados. Ya se llamó a los alcaldes donde estarán ubicadas zonas. Así que, señor alcalde, si a usted no lo han llamado a contarle los planes de desarrollo y enfoque territorial, pues quédese tranquilo”, dijo Barreras en Caracol Radio.

Criticó a los alcaldes y gobernadores que en este momento ‘posan’ de no querer en sus jurisdicciones guerrilleros.

Se abstuvo, sin embargo, de hacer público el listado de esos 23 municipios, pues dijo que solo el jefe negociador del Gobierno, Humberto de la Calle, la puede dar a conocer.

Adelantó, eso sí, que se trata de veredas que tienen fácil acceso (pocos accidentes geográficos como ríos y montañas) no solo para los guerrilleros, sino para el mismo Estado y para el monitoreo internacional: que haya carreteables, que haya agua para que las personas que van a estar allí unos pocos meses tengan condiciones, agregó Barreras.

Precisó que no es que a esos municipios lleguen ‘vecinos nuevos’, porque “las Farc han estado durante años en muchos municipios de Colombia. Y allí están. La diferencia es que ya no estarán en armas combatiendo, sino en la disposición clara de dejar las armas para reintegrarse a la sociedad”.

De esto se colige, y puede resultar hasta obvio, que las zonas de concentración estarán en regiones donde esa guerrilla ha tenido presencia histórica.

En la entrevista, Darío Arizmendi, director de ‘6 AM Hoy por Hoy’, afirmó que ni Cundinamarca ni Santander tendrán esas zonas de concentración. Barreras respondió que estaba bien informado.

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