Agentes del Servicio Bolivariano de Inteligencia (Sebin) y de la Guardia Bolivariana llegaron a su vivienda, ubicada en Campo Elías (Mérida), para capturar a su padre, Omar Lares, alcalde de ese municipio.
En la casa también estaban Ramona Rangel (madre de Juan Pedro y esposa del alcalde) y su otro hijo, que tiene 13 años, relata la organización de derechos humanos Provea.
Aunque la familia Lares pudo escapar, al final los agentes de la dictadura detuvieron al joven de 24 años. Él y su mamá son colombianos.
“Estamos buscando que la Cancillería colombiana, a través de la embajada, de los consulados y a través de la misma canciller (María Ángela Holguín) pueda de alguna u otra manera intervenir directamente, ya que es un ciudadano colombiano”, explicó el alcalde Lares, consultado por EFE.
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El mandatario municipal se mantiene en el cargo y dejó a un funcionario encargado durante 90 días, previa autorización del concejo local.
“Ya va a cumplir 45 días (…) de estar ilegalmente privado de su libertad; es un secuestro, para mí es un secuestro, porque se han violentado todo los debidos procesos”, dijo el alcalde.
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