La emergencia se registró este miércoles en una finca de La Calera (Cundinamarca) y desató una emergencia en la población, ya que según varios medios la clínica a donde fueron trasladados tuvo que ser evacuada ante una posible propagación.

Pero este jueves, un cultivador de papá que se identificó como Ernesto Gómez dijo a Caracol Radio que la intoxicación no se dio fumigando, sino que los trabajadores “desocuparon un galón en donde vienen los agroquímicos y no lo lavaron bien, seguro, y ahí empacaron la bebida. Cuando tomaron fue que ocurrió”.

También le puede interesar:

Si bien Gómez dijo que no hay de qué alarmarse y que los labriegos toman todas las medidas a la hora de hacer una aspersión, otro campesino explicó a la emisora que no todas las veces utilizan la protección adecuada.

Por ahora, el gobernador de Cundinamarca, Jorge Rey, respalda la hipótesis del guarapo y declara emergencia en esa población y en los municipios de Sopó y Tocancipá, por un posible vertimiento toxico de pesticida en las quebradas que los abastece, informó Noticias Caracol.

En ese sentido, los organismos de salud recogen muestras de agua para establecer si hubo contaminación.

LO ÚLTIMO