Ese mismo día, en un espacio denominado ‘Nota ciudadana’ y dedicado a que difundan sus textos personas ajenas a su planta, Las 2 Orillas copió y pegó, sin la más mínima edición, el texto del portal de El Heraldo.

Andrés Guevara Borges, editor de Aldia.co y autor del artículo, se dio cuenta de lo ocurrido este miércoles y le reclamó a María Elvira Bonilla, directora de Las 2 Orillas, por el plagio.

En un mensaje que el mismo Guevara Borges publicó en Twitter, le dijo a Bonilla lo siguiente:

Les escribo porque con sorpresa encontré hoy que su portal, en la sección Nota Ciudadana, plagió íntegra y descaradamente un artículo que escribí en el portal del cual soy editor”.

“No estamos hablando de una mala práctica, estamos hablando de un burdo ‘copy/paste’. No es excusa que el espacio sea de una nota ciudadana. Ustedes, como cualquier medio del mundo, deben hacerse responsables de lo que publican y de quienes publican así como reciben con gusto el tráfico e interacciones que generan por cuenta de contenidos ajenos”, escribió el periodista.

Guevara Borges, además, pidió retirar la nota ciudadana y ofrecer disculpas a los lectores de Las 2 Orillas por la copia.

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Bonilla respondió que no había plagio porque, según ella, se reconoce la autoría y el medio en el que fue publicada la noticia originalmente.

“El debate en torno a la ‘agregación de contenidos’ en la web está abierto y todos los medios digitales estamos trajinando un camino inédito que cada día se construye”, aseguró la directora de Las 2 Orillas.

La respuesta de Bonilla muestra que ella tiene un concepto errado de agregación. A diferencia de lo que muchos creen, agregar no es copiar y pegar contenidos, sino construir textos con lo que puedan aportar a una idea temática novedosa las informaciones de otros medios.

De hecho, un ejemplo de una buena práctica de agregación es, justamente, el artículo de Aldia.co que motiva el reclamo de Guevara Borges.

A partir de una entrevista que ‘Las chivas del llano’ le hizo al alcalde de Yopal, el periodista construyó una versión con enfoque y redacción propios.

El tema no es de poca monta. Con la explosión de medios digitales, nativos o no, y de las redes sociales, se está volviendo común que, bajo el pretexto de dar simplemente el crédito, se puedan tomar y aprovechar piezas completas que conllevan todo el esfuerzo y el buen crédito sus autores.

Si bien Bonilla tiene razón en el sentido de que “todos los medios digitales estamos trajinando un camino inédito que cada día se construye”, se debe entender también que hay un mínimo de buenas prácticas en las que se deben respetar y evidenciar claramente la autoría y propiedad de las de fuentes de donde se toman los contenidos.

En ese sentido, no es suficiente con dar el nombre del autor al principio y el medio de donde fue ‘retomado’ al final, sin que haya un permiso expreso.

Si se entiende la agregación como la simple circulación libre de contenidos completos, será muy duro superar el difícil e inédito camino al que se refiere, porque, entre otras cosas, allanará el camino a quienes se oponen, con toda fuerza, a esta nueva y válida modalidad de información.

Por Gustavo Gómez Martínez – Pulzo

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