La menor salió el pasado domingo de su casa, ubicada en el barrio Capellanía, y varios vecinos vieron los golpes y quemaduras que tenía en su cuerpo, por lo que llamaron a las autoridades, informó Noticias Caracol.

Una de las vecinas habló en condición de anonimato con ese noticiero e indicó que la abuela “maltrataba a la niña, la ponía a cocinar y a lavar la ropa de ella; la ponía a hacer mil tareas en la casa”.

Otra habitante del sector, que también prefirió no revelar su identidad, aseguró al informativo que “la señora le pegaba mucho y le gritaba una cantidad de groserías”.

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Marleny Moreno, secretaria de Desarrollo Social aseguró a ese medio que la niña llegó al hospital con quemaduras “de segundo grado en sus piernas y partes íntimas”.

En un primer momento la menor fue trasladada a un centro médico de Cajicá, pero luego fue llevada al Hospital de la Misericordia, en el centro de Bogotá, donde se recupera actualmente.

Noticias Caracol conoció el testimonio que dio la niña en una comisaría de familia, y allí ella “refiere haber sido introducida con ají en su boca y [recibido] patadas en el abdomen”.

Ese noticiero también tuvo acceso a la declaración de la abuela, quien manifestaba que la menor se había robado 50.000 pesos:

“La señora manifiesta que la quemó y que no se acuerda de nada; que pierde el control, que no sabe qué pasó, que lo hizo de forma inconsciente”.

Las autoridades ya investigan el caso, que fue asignado a una fiscal seccional del municipio de Zipaquirá, en compañía del CTI.

Este aberrante hecho recuerda otro que ocurrió hace solo unos días en la localidad de Ciudad Bolívar, en el sur de Bogotá, cuando un bebé de un año y siete meses fue herido con bisturí en sus genitales. Debido a la gravedad de las heridas, tuvieron que amputárselos.

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